Imagen: Barcelona – África Rally
El próximo 26 de diciembre partirá de la ciudad catalana de Sant Esteve el Rally Barcelona-África 2007, una iniciativa solidaria abierta a todas las personas interesadas y hecha a la medida de los más aventureros. El objetivo es cruzar el desierto del Sahara a través de Marruecos, Mauritania y Mali, lo que permitirá visitar también ciudades tan exóticas como Tánger, Casablanca, Marrakesh, Laayounne, Nouadhibou, Aleg, Kayes y Bamako, la capital de Mali que cierra el periplo. Será allí, precisamente, donde se llevará a cabo el proyecto que promueve esta edición: la construcción de una escuela de primaria y secundaria para educar a niños y niñas. «Es un proyecto a largo plazo que cuenta con patrocinadores del sector privado en el capital de Mali», explican los organizadores.
Al final del recorrido todos los participantes venden sus vehículos para recaudar los fondos necesarios y construir la escuela
En cuanto a los detalles del viaje, la principal característica es que se realiza a bordo de un coche usado cuyo coste aproximado ronda los 1.000 euros ¿La razón? Al final del recorrido todos los participantes venden sus vehículos para recaudar los fondos necesarios para construir la escuela. Los impulsores del proyecto aseguran que el coche más idóneo para este viaje es un 4×4 de gasoil, preferiblemente japonés, ya que es el tipo de automóvil «que mejor se vende en Mali y, por lo tanto, lo mejor desde el punto de vista de la recaudación del dinero». Los propios organizadores disponen de dos Fiat Panda 4X4 a la venta, por 600 euros cada uno. Hay que tener en cuenta, eso sí, que en un recorrido de 6.000 kilómetros pueden producirse averías que no siempre serán fáciles de resolver, por lo que hay que asegurarse, antes de partir, de que el coche se encuentra en buenas condiciones o, al menos, que en caso de avería sea sencillo encontrar recambios.
En resumen, la experiencia tiene una duración aproximada de entre seis y siete días. Durante este tiempo se puede optar por alojarse en un hotel, en un campamento o dormir directamente sobre una colchoneta en el desierto, lo que ofrece la posibilidad de descubrir los magníficos amaneceres de África. Todos estos detalles influyen en el coste final del viaje, que corre por cuenta de cada participante. En total, la cuenta de gastos puede ascender a unos 1.500 euros por persona para cubrir alojamiento, comida y combustible. También hay que añadir el billete de avión para regresar desde Mali (se pueden conseguir vuelos desde 350 euros), la cuota de alta en el rally (250 euros) y los gastos obligatorios de vacunas, visados y exportación de vehículos.
Equipamiento necesario
El requisito de cruzar el desierto exige prever la necesidad de combustible. Si se prefiere, se puede optar por un recorrido alternativo a través de asfalto, pero es posible que esto alargue la aventura más de lo deseado. Además, aunque en Marruecos no suele haber problema con el fuel, según los organizadores, a partir del Sahara Occidental sólo se encuentra gasolina súper con plomo, lo que podría afectar a los coches más modernos. Lo más recomendable es viajar, por lo menos, con cuatro bidones de 20 litros: dos para gasolina o gasoil y otros dos para agua potable. Asimismo, a medida que se vacíen, es importante llenarlos en las gasolineras que se encuentren después de haber pasado Marruecos.
Hay quien opta por donar la comida sobrante o la ropa y regresar a España sin equipaje
Respecto al equipaje, el hecho de volver en avión obliga a empaquetar en una maleta los objetos personales. Hay quien opta por donar la comida sobrante o la ropa y regresar a España sin equipaje. Ésta es una elección personal. Por otro lado, si se va a acampar en el desierto hay que llevar todo el material necesario (tienda de campaña, saco de dormir, etc.), incluidas varias mantas por si fuera necesario combatir el frío de la noche. También forman parte del equipo los recambios, neumáticos, filtros, aceite o herramientas que puedan ser necesarias para resolver una avería mecánica del vehículo. Y no se deben olvidar las sartenes y ollas para cocinar, ni las bolsas para proteger de la arena la propia comida o la cámara de fotos. La finalidad es minimizar el fracaso y no dejar al azar cualquier posible contratiempo.
En la actualidad, Mali es uno de los países más pobres del mundo. Su economía gira en torno a la agricultura y la ganadería, mientras que el acceso a la educación es escaso. Por esta razón, el rally Barcelona-África 2007 prevé destinar parte de la recaudación a la construcción de una escuela en la capital, Bamako. La otra parte del dinero que genere la venta de vehículos se dedicará a la concesión de créditos a mujeres que quieran poner en marcha empresas sencillas.
La otra parte del dinero que genere la venta de vehículos se dedicará a la concesión de créditos a mujeres que quieran poner en marcha empresas sencillas
De esta manera, se pretende impulsar el papel de la mujer en la economía, ya que está relegada a los trabajos peor remunerados. Serán ONG que trabajan directamente en territorio africano las que se encarguen de distribuir el dinero y financiar este proyecto, además de poner en marcha una tercera iniciativa para combatir el sida y el cólera. Ambas están consideradas enfermedades devastadoras entre los habitantes de Mali ya que, en el caso de la segunda, acaba con la vida de cinco millones de personas cada año, según datos de Acción contra el Hambre. Por esta razón, una última parte del dinero recaudado se destinará a aliviar el sufrimiento de estos pacientes con medicamentos.
