Utilizar el tren o el autobús son dos formas cómodas y rápidas de trasladarse de un lugar a otro, pero el viaje no siempre se desarrolla conforme a lo previsto en inicio. Los retrasos, los problemas con el equipaje o con los billetes pueden fastidiar las vacaciones. Para que esto no suceda, o minimizar las consecuencias si surge algún problema, conviene conocer cómo viajar en estos dos medios de transporte.
Viajes en bus
Si durante las vacaciones se opta por algún tipo de transporte colectivo, lo primero que se debe hacer es sacar el billete con suficiente antelación, bien en las oficinas de las empresas de transporte, contratando el servicio a través de una agencia de viajes o por Internet.
Si se va a viajar en vacaciones en transporte colectivo, conviene sacar el billete con antelación
En el billete habrá de constar los siguientes datos:
- Precio total
- Puntos de origen y destino
- Nombre de la empresa
- Peso del equipaje y número de bultos que lo componen
Si por alguna causa el viaje se viese interrumpido, la empresa de transporte estará obligada a proporcionar un medio alternativo para llegar al destino.
Si el equipaje sufre deterioros o se extravía, sin haber declarado su valor, la empresa deberá abonar al viajero 9,02 euros por cada kilogramo, con un límite máximo de 20 kilogramos.
Por la propia seguridad del viajero, y la del resto de pasajeros, se debe exigir que los conductores no permanezcan al volante más tiempo del reglamentario (unas cuatro horas y media seguidas como máximo). Solo está permitido que el conductor conduzca cinco horas seguidas si está cerca una parada o el lugar de destino.
Retrasos e indemnizaciones en tren
Si una vez contratado un trayecto completo en tren, se pierde el enlace por un retraso de la compañía, se tiene derecho a que se facilite un nuevo billete o a que devuelvan al viajero al punto de partida de forma gratuita.
En caso de que el tren llegue a su punto de destino con más de una hora de retraso, se tiene derecho al pago de una indemnización, para lo cual se deberá sellar el billete en la estación de destino. Si el porcentaje de demora sobre la duración del trayecto es de hasta un 50%, el porcentaje de devolución sobre el precio del billete es de un 25%. Si la demora es de más del 50% y menos del 100%, el porcentaje de devolución es del 50%.
Si el porcentaje de demora es del 100%, se devolverá el importe íntegro del billete
Si el porcentaje de demora es del 100%, este es el mismo porcentaje que tienen que aplicar en la devolución del precio de su billete. Pero si el retraso es inferior a una hora, no se tendrá derecho a indemnización alguna. En el caso de viajar en AVE, se podrá hacer gratis si se retrasa más de cinco minutos sobre la hora prevista.
En el caso del tren es recomendable acudir con tiempo suficiente a la estación. Si por problemas de la compañía el tren sufre un retraso en la salida, el cliente tiene derecho a exigir la devolución de la cantidad abonada, incluida la correspondiente a suplementos y facturación de equipajes. También se puede cambiar el billete para una próxima salida. En este caso se puede incluso canjear por uno de clase superior sin que se tenga por ello que abonar ningún extra.
