El Sistema de Calidad Turística Española, a través del Instituto de la Calidad Turística de España (ICTE), incluirá en su norma de calidad todos aquellos requerimientos que garanticen que un establecimiento turístico que posea la marca «Q» es accesible para todos los clientes, incluidas las personas discapacitadas, según explicó el director de Turespaña, Javier Piñanes.
Existen unos 3.000 establecimientos, entre todos los sectores implicados, adheridos a la imagen de la marca de calidad turística española, 281 de ellos certificados y con el sello correspondiente. Piñanes propugna extender la accesibilidad a la «totalidad de los destinos turísticos, y no sólo a algunos de los servicios, ya que es un factor determinante de la calidad turística». «Significa mejorar el diseño, la funcionalidad y, por tanto, la calidad del turismo y ocio para todos los ciudadanos», expuso Piñanes en el marco de la clausura del Congreso sobre Turismo y Accesibilidad, celebrado en el Palacio de Congresos de Madrid.
Seguridad
Según dijo el director de Turespaña, «no se deben desarrollar destinos turísticos para discapacitados, sino que se debe hablar de turismo para todos», al tiempo que subrayó la necesidad de «seguridad» en los destinos turísticos con el fin de evitar que la propia actividad turística contribuya a que crezca el número de personas con discapacidad, colectivo que se estima en 500 millones de personas en el mundo, 50 millones en Europa y 3,5 en España.
Por su parte, el secretario de Estado de Comercio y Turismo, Francisco Utrera, aseguró que su departamento trabaja a pleno rendimiento para conseguir que España se convierta en uno de los principales destinos turísticos europeos accesibles para las personas con discapacidad y puntualizó que se está trabajando para conseguir mejorar su calidad de vida.
