Siete pistas para ahorrar en bodas y comuniones

Para celebrar días tan especiales sin arruinarse se pueden alquilar los vestidos de los protagonistas o celebrar el banquete en casa, entre otras medidas de ahorro
Por Blanca Álvarez Barco 28 de mayo de 2015
Img comuniones hd

Mayo y junio son meses repletos de bodas y comuniones. Estos eventos especiales merecen ser celebrados, pero en ocasiones resultan bastante costosos ya que, de media, los gastos de una primera comunión sobrepasan los 2.000 euros y los de un enlace rebasan los 16.000. Para vivir estos días de manera especial pero sin arruinarse, pueden seguirse algunas pautas de ahorro, que disminuirán el precio total del festejo sin deslucirlo. Las siete medidas más básicas se exponen a lo largo de este artículo.

1. Iglesia

Las bodas pueden tener lugar en una iglesia o hacerse por lo civil. Es en este segundo caso donde suelen resultar más económicas, en función del presupuesto y circunstancias de los novios. Si se celebra en un templo, se da un pequeño donativo al centro religioso, que en todo caso es voluntario. El adorno del lugar (si la iglesia en cuestión lo permite) puede hacerse por parte de la propia familia de los novios, con sencillos arreglos florales, o bien decidirse por la sobriedad. También, si hay más de una boda ese fin de semana, se pueden compartir gastos de decoración con otras parejas.

La primera comunión es un sacramento católico, por lo que solo se puede realizar en una iglesia o en un lugar consagrado. La mayoría de niños lo hace con su colegio o parroquia, y desde estas instituciones se encargan de todo lo referente a la celebración religiosa. En ambos casos, es habitual que la familia entregue un donativo voluntario al templo o escuela.

2. Los vestidos se pueden alquilar

Una de las partidas más costosa es la del vestido de la novia o de los niños que toman su primera comunión. Pero, hoy en día, hay numerosas empresas dedicadas al alquiler de estos trajes que, por un precio ajustado, brindan modelos actuales, bonitos y en perfecto estado. Lo mismo sucede para las invitadas, en el caso de las bodas. Y, en las comuniones, lo más conveniente para padres, hermanos y demás familiares es optar por ir más arreglados de lo normal, pero no en exceso.

3. Peinados, sencillos y en casa

Respecto al pelo, sobre todo en el caso de las novias -y las madres de los pequeños que comulgan- se puede recurrir a los servicios de amigas que tengan mano para peinar y hacer arreglos.

Desde hace unos años, las niñas que celebran su primera comunión también acuden a veces a la peluquería para ese día. Sin embargo, por el sentido de la fiesta y la edad de las menores merece tenerse en cuenta optar por peinarse en casa de manera sencilla.

4. Invitaciones, detalles y recordatorios hechos a mano

Las invitaciones para una boda se llevan buena parte del presupuesto. Los gastos de imprenta, más la calidad de la cartulina, sobres… al final encarecen mucho las invitaciones. Este gasto se puede reducir, si se diseñan por Internet y se imprimen en casa. Así, además, quedarán por completo al gusto de los novios, quienes podrán hacer cuantas pruebas quieran antes de imprimirlas de manera definitiva.

Es común dar un pequeño detalle o recuerdo de la boda a los amigos y familiares, como también ofrecer recordatorios y algún regalo en las comuniones. En ambos casos, si se es un poco mañoso o artista, regalos y recordatorios se pueden diseñar y realizar a mano. Serán detalles únicos y originales, además de más baratos.

5. Viajes de novios distintos y baratos

Para disfrutar de unos días tranquilos tras la boda, no es preciso viajar al Caribe ni al otro extremo del mundo. Se pueden hacer trayectos en coche o moto por España o en países vecinos y cercanos, que resultarán más económicos y divertidos; también es posible pasar unos días en una playa de nuestro litoral o en una tranquila casa rural… No hay por qué arruinarse para disfrutar de unas jornadas de relax.

6. Fotos y vídeos realizados por amigos e invitados

Las fotografías y vídeos de una comunión o boda suponen un importante desembolso. En el caso de los pequeños, numerosos colegios y parroquias no permiten tomar imágenes; ellos contratan a un fotógrafo profesional y después dan la opción a los padres de adquirir este recuerdo.

En las bodas, el fotógrafo es escogido casi siempre por los novios. El reportaje completo (35 fotos y ampliación de 50 x 60) ronda 1.500 euros de media. Si se añade vídeo de ceremonia y fiesta, los costes se disparan. Por ello, si se tiene un familiar o amigo con dotes para la fotografía, conviene recurrir a él para las instantáneas de la ceremonia.

Si se desea tener recuerdos de la fiesta en imágenes, las fotos que tomen invitados y familia serán más espontáneas y divertidas.

7. Banquete y fiesta, ¿por qué no en casa?

Aunque con la crisis los precios han bajado, el banquete para una boda de tamaño medio -con comida o cena más música y barra libre- no sale por menos de 3.000 euros. Las comuniones resultan más económicas, pero también se llevan una buena parte del presupuesto familiar. ¿Por qué no hacerlas en casa?

Si se necesita ahorrar o contener el gasto, las celebraciones se pueden hacer familiares (y los amigos más íntimos) y en casa. Contratar un catering y ofrecer un lunch, una recepción informal, es una opción más barata, igual de sabrosa y diferente.

Recurrir a préstamos, la última opción

Recurrir a la solicitud de un crédito para poder pagar una fiesta siempre debe ser la última opción. Es preferible hacer un ágape más sencillo que endeudarse para un montón de meses o años.

Antes de acudir a la financiación bancaria para celebrar bodas o comuniones, hay que analizar si compensa y la capacidad de responder cada mes a la cuota e intereses del dinero solicitado sin desbaratar el presupuesto familiar.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube