Cómo aprovechar la subida del petróleo para ahorrar

Se puede invertir a través de las compañías petrolíferas que cotizan en Bolsa, por medio de fondos de inversión, ETF y depósitos
Por José Ignacio Recio 14 de abril de 2011
Img barriles petroleo listado
Imagen: ezioman

La actual escalada en los precios del crudo puede tener un aspecto positivo. Es posible recoger plusvalías si se invierte en Bolsa a través de las compañías petrolíferas que cotizan en los parqués, pero también por medio de fondos de inversión, de ETF o de depósitos referenciados a empresas del sector. Las propuestas para canalizar los ahorros en las compañías petrolíferas que cotizan en los mercados bursátiles están representadas por valores europeos (Repsol, Total Fina, British Petroleum o Royal Dutch Shell), aunque hay opciones más agresivas que se pueden formalizar en los parqués norteamericanos (Exxon Mobile, Chevron…) y que, en principio, recogen las posibles alzas del precio del crudo. Sin embargo, conviene tener claro que a medio y largo plazo la subida del petróleo tendrá un efecto negativo sobre los usuarios españoles. Esto se debe a que supondrá alzas generalizadas de gasolina y carburantes, que se trasladarán a los precios del transporte público (autocares, aerolíneas, etc.) y a algunas facturas domésticas.

El petróleo en la Bolsa

Una de las consecuencias más directas de las revueltas populares en los países árabes ha sido el encarecimiento del precio del crudo, que en los mercados internacionales se paga ya a 115 dólares por barril. No faltan las voces que alertan de que podrían acercarse a la barrera de los 150 dólares si continúa la incertidumbre sobre la zona. Los contratos a futuro del petróleo suben sin parar durante las últimas semanas y se acercan a los recientes máximos a medida que el conflicto en Libia y la agitación en otras áreas de la región mantienen los temores de interrupciones del suministro. El flujo de petróleo podría tardar años en restablecerse por completo, según advierte Leo Drollas, economista jefe del Centre for Global Energy Studies.

A medio y largo plazo, este alza tendrá un efecto negativo sobre los usuarios españoles, ya que incidirá en las subidas generalizadas de gasolina y carburantes y, como consecuencia, también en el precio del transporte público y algunas facturas domésticas. Pero en un plazo más corto, puede representar una oportunidad para incrementar los beneficios sobre el capital invertido a través de la contratación de productos financieros que tengan al petróleo como principal destinatario. Se pueden registrar importantes revalorizaciones si el precio del crudo en los próximos meses continúa su escalada.

El petróleo no es un activo financiero con gran oferta de productos, pero es posible beneficiarse de esta tendencia alcista

El «oro negro» no es un activo financiero con gran oferta de productos, pero es posible beneficiarse de esta tendencia alcista. Una de las posibilidades es hacerlo a través de las empresas productoras o que comercializan esta materia prima y que cotizan en la renta variable, bien en mercados nacionales o internacionales.

  • Mercado Continuo español: hay dos posibilidades para comprar acciones en empresas de estas características. Por un lado, Repsol, como integrante del «Ibex-35», y por otro, fuera del índice selectivo, la opción la representa Cepsa.

  • Mercado europeo: hay más opciones para contratar acciones de empresas petrolíferas. Destacan por su volumen de negocio Total Fina, British Petroleum o Royal Dutch Shell, entre otras.

  • Mercado americano: la oferta se amplía a través de una selección más completa y diversificada que puede ayudar a los inversores a mejorar su inversión. Entre estas empresas, destacan por su liderazgo en el sector algunas como Exxon Mobile o Chevron.

La sencillez en su contratación y el conocimiento de los mercados bursátiles por parte de los usuarios serán las mejores armas para tomar posiciones en los productos derivados de la renta variable. Sus comisiones por operación (compra y venta) oscilan entre 10 y 20 euros, en función de si se opera en mercados europeos o norteamericanos. Esta estrategia permite al inversor medio recoger parte de las subidas del crudo a través del área de negocio de estas empresas, aunque no en toda su intensidad y en la misma magnitud que el barril de petróleo.

ETF energéticos

De mayor utilidad para beneficiarse del encarecimiento del petróleo son los ETF, que permiten optar por muchos modelos en su contratación. Los hay compuestos por empresas o índices ligados al crudo en exclusiva, o en combinación con otras energías, como el gas natural u otro tipo de carburantes, algo que ayuda a diversificar mejor el capital invertido.

No obstante, en su afán de ofrecer nuevas modalidades a sus clientes, las gestoras han lanzado al mercado otros ETF mixtos. En ellos están integradas la mayoría de materias primas, desde las agrícolas (maíz, trigo, soja, azúcar…) a las energéticas (petróleo, gas natural…) y los metales preciosos (oro, plata, platino…).

Esta propuesta global, aparte de apostar por varios sectores económicos de fuertes perspectivas económicas, permite diversificar aún más la inversión y decantarse por segmentos en alza de una manera global con un mismo producto. Por el contrario, estos aún no son muy conocidos entre los inversores menos habituados a operar en los mercados. Gran parte de estos ETF se pueden contratar desde la mayoría de bancos, cajas de ahorro e intermediarios financieros que operan en España a través de unas tarifas estándar que están en consonancia con las aplicadas a la Bolsa: entre 15 y 20 euros en concepto de comisión por cada operación de compra y venta para los mercados europeos y norteamericanos.

Otros productos financieros

Los ahorradores pueden invertir a través de los fondos de inversión tradicionales por medio de las propuestas que realizan las gestoras que apuestan por el «oro negro». Tiene el inconveniente de que no se recogen en toda su profundidad las alzas que pudiese experimentar la cotización. La selección de fondos en esta materia prima, aunque no es tan amplia como en otros activos financieros, permite seleccionar alguna opción de contratación, si bien está destinada a períodos de permanencia de medio y largo plazo.

Si se quiere obtener mejor rentabilidad para estas subidas, la solución -a costa de asumir más riesgos- pasaría por suscribir algún CFD (contratos por diferencia) que recoja la evolución de esta materia prima. Se caracterizan por ser un contrato entre el inversor y la entidad financiera que lo comercializa (banco, broker u otros agentes financieros), que se plasma en la compra de títulos en Bolsa. Los primeros invierten una cantidad en este producto y los segundos se encargan de la adquisición. La clave está en que la liquidación se hace efectiva cuando lo consideren oportuno los inversores.

Otra opción es invertir en petróleo a través de fondos en esta materia prima, gestionados por agentes financieros especializados. Para su contratación, en la mayoría de las ocasiones es necesario acudir a los mercados internacionales debido a que en España es todavía un producto financiero incipiente y su oferta no cubre la demanda de los clientes. A través de esta estrategia de inversión se puede disponer de una total liquidez y en cualquier momento se podrán cancelar las participaciones y disponer del dinero en efectivo, sin comisiones adicionales. Es una de las fórmulas más adecuadas para beneficiarse de sus posibles alzas, ya que se invierte de manera directa en su mercado, sin combinarlo con otros productos o activos.

«Oro negro» a través de los depósitos

Una forma más segura de invertir en el mercado del petróleo son los depósitos referenciados de modo parcial a este activo financiero. Como principal ventaja, aportan la seguridad que generan, ya que se garantiza la totalidad del capital invertido, así como una menor vulnerabilidad ante las posibles caídas en los precios. Por el contrario, no recogen la totalidad de sus subidas, sino que se puede obtener entre un 6% y un 9% de rentabilidad, siempre que se cumplan una serie de requisitos que coinciden con una evolución positiva de las compañías que cotizan en Bolsa.

Hay varias opciones para acogerse a esta modalidad de inversión. Entre otras, figuran las imposiciones ligadas a empresas petrolíferas que permitan incrementar la remuneración del producto, como en el caso del «Depósito Confianza 6» de Kutxa, o a través del producto «Bent Premier», que comercializa Caixa Galicia.

Toma de posiciones

Una de las claves para entender y adentrarse en estos mercados (los derivados del petróleo) es saber en qué momento se deben iniciar las posiciones compradoras, definidas por las siguientes situaciones que se pueden plantear en un ciclo económico:

  • Cuando el precio del crudo está enmarcado en una corriente alcista, como consecuencia de algún factor de inestabilidad económico o político (revueltas populares, cambios políticos, guerras…).

  • En el momento en que la demanda del petróleo sea superior a la oferta, ya que trae como consecuencia que sus precios se revaloricen en los mercados.

  • Ante la posibilidad de desabastecimiento de los mercados como consecuencia directa de algún conflicto bélico en los países productores.

  • En momentos de tensiones de los mercados, cuando sus precios pueden tener desviaciones al alza de más del 5%, en una o varias sesiones de cotización.

  • Cuando su rentabilidad está por encima de la que ofrecen los productos de renta fija e, incluso, de la que determinan otros activos financieros (índices bursátiles, materias primas, etc.).

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube