Becas europeas para estudiantes de FP

Las prácticas en el extranjero permiten que el estudiante conozca cómo se desarrolla su oficio en otros países y mejore su competencia lingüística en otros idiomas
Por Marta Vázquez-Reina 24 de octubre de 2008
Img estudiantes fp

Gracias a distintos programas de becas europeos como Erasmus o Leonardo da Vinci, los estudiantes de Formación Profesional españoles pueden ampliar su formación práctica en las distintas familias profesionales en cualquier país de la Unión Europea. Esta oportunidad les permite, además de reforzar los conocimientos de otros idiomas, acercarse a la realidad laboral cultural y social de otros países.

Formarse en Europa

Las prácticas en empresas forman parte obligatoria del currículum de los estudiantes de Formación Profesional (FP) en nuestro país; a través de los denominados módulos de Formación en Centros de Trabajo (FCT), tienen la oportunidad de realizar una primera aplicación práctica de los conocimientos adquiridos durante sus estudios a la vez que se acercan a la realidad del entorno productivo propio de su perfil profesional. Pero además, a estos beneficios que aporta la FCT, los alumnos de Formación Profesional, tanto de Grado Medio como de Grado Superior, pueden sumar el adquirir mayor competencia lingüística en otros idiomas, así como el conocer la forma de trabajar y la cultura de otros países europeos. ¿Cómo? Mediante el curso de estos módulos formativos en otro país de la Unión Europea, una oportunidad que les brindan diversos proyectos europeos en el ámbito de la formación y la educación, tales como Erasmus o Leonardo da Vinci.

Estos proyectos se engloban desde el pasado año en el denominado Programa de Aprendizaje Permanente (PAP) de la Unión Europea, un programa de acción comunitario que facilita, mediante la concesión de ayudas y subvenciones, el intercambio, la cooperación y la movilidad entre los sistemas educativos y formativos de los países europeos participantes.

Formación Profesional de Grado Superior

Desde el pasado curso 2007-2008, los estudiantes españoles de los ciclos de FP de Grado Superior forman parte, junto con los alumnos universitarios, de los colectivos educativos que se pueden beneficiar del programa Erasmus, cuyo objetivo es atender a las necesidades de enseñanza y aprendizaje de todos los participantes en la enseñanza superior de Europa. A través del proyecto de movilidad de estudiantes en prácticas de este programa, quienes cursan FP de Grado Superior tienen la oportunidad de realizar un periodo de formación práctica en una empresa u otra organización de otro país europeo participante en el programa.

La beca es complementada, en la mayoría de los casos, por las distintas administraciones autonómicas u otros organismos

Para afrontar los gastos derivados de la movilidad, los estudiantes son beneficiarios de una beca económica, destinada a cubrir los costes de desplazamiento, alojamiento y transporte en el país de destino. La cuantía de esta beca, entre 150 euros y 100 euros semanales, según el país donde se desarrollen las prácticas, es complementada, en la mayoría de los casos, por las distintas administraciones autonómicas u otros organismos mediante acuerdos de cofinanciación establecidos con la Unión Europea.

Los alumnos Erasmus de FP realizan en algún país europeo el módulo correspondiente a la Formación en Centros de Trabajo, según el convenio que se estipule entre su centro de estudios de origen y la organización o empresa de acogida. La formación se lleva a cabo durante un periodo aproximado de 12 semanas, que se amplía en la mayoría de los casos entre una y tres semanas más para realizar un curso de idiomas previo en el país de traslado, con el objetivo de familiarizar al alumno con la lengua en la que deberá comunicarse durante el tiempo de las prácticas.

La solicitud se realiza a través del centro de formación, que debe poseer la Carta Erasmus Ampliada

Los alumnos interesados en realizar este periodo formativo en Europa no pueden solicitarlo de manera individual, sino que tienen que hacerlo a través de su propio centro de formación, que deberá contar con la denominada Carta Erasmus Ampliada, imprescindible para solicitar una acción de movilidad dentro del programa Erasmus. El proceso de solicitud se inicia normalmente el curso anterior al que se van a realizar las prácticas; después, los centros seleccionan a los beneficiarios según su expediente académico, el conocimiento del idioma del país de destino, así como por su actitud e interés en adaptarse a nuevos entornos. En algunos casos, también se tiene en cuenta el nivel de renta de la unidad familiar.

FP Grado Medio

Los estudiantes o titulados de FP Grado Medio pueden participar en proyectos de movilidad individual dentro de Europa gracias al programa Leonardo da Vinci. Este programa, con más de 15 años de vigencia, está dirigido a atender las necesidades de enseñanza y aprendizaje de todas las personas implicadas en la educación y Formación Profesional; uno de sus objetivos clave es facilitar la movilidad transnacional, ofreciendo oportunidades de aprendizaje y de conocimiento mutuo entre los ciudadanos de los países de la Unión Europea, gracias a la realización de estancias de prácticas en empresas o centros de formación de otros países.

Las becas se conceden en función de la nota media del expediente académico y los conocimientos de la lengua extranjera

Los periodos de prácticas están subvencionados mediante una beca por la Unión Europea, cuya cuantía dependerá tanto del número de participantes del proyecto de movilidad, como del país de acogida y la duración de la estancia. Se desarrollan por un mínimo de dos semanas y un máximo de 39, e incluyen generalmente un curso de idiomas de dos o tres semanas de duración en el país de acogida.

Al igual que en el programa Erasmus, los estudiantes no pueden solicitar las becas directamente, sino que deben hacerlo a través de sus centros de formación profesional o de organizaciones que tengan aprobados proyectos de prácticas empresariales; por eso, quien desee solicitar una beca Leonardo de movilidad deberá dirigirse a la organización en que realiza sus estudios, que designará a los beneficiarios de las becas en función de la nota media del expediente académico, los conocimientos de la lengua extranjera del país de destino y en algunos casos por el criterio y opinión de los profesores del alumno.

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