Las altas temperaturas de este verano han provocado aumentos de hasta un 16% en el consumo de agua en las grandes ciudades respecto a 2002, según datos de ayuntamientos y empresas que gestionan este recurso. No obstante, los embalses mantienen unas reservas superiores a la media del último decenio y sólo se han registrado restricciones en algunos puntos de Cantabria y Murcia.
Logroño, Valencia, Castellón, Barcelona, Madrid, Córdoba, Sevilla, Palma de Mallorca, Santa Cruz de Tenerife, Orense y La Coruña, son algunas de las ciudades donde la media de consumo en los meses de junio, julio y agosto registró el mayor aumento, entre el 4,2 y 16,3%, aunque en periodos concretos, y por el incremento de población en vacaciones, llegó a dispararse hasta un 20%.
El 1 de agosto se registraron «picos» de consumo en varias ciudades, coincidiendo con el día en que se alcanzó la máxima temperatura del verano, más de 45 grados, en Sevilla y Córdoba.
En cuanto a la reserva hidráulica, pese al calor y las pocas lluvias registradas, los embalses españoles almacenan ahora 32.081 hectómetros cúbicos, un 59,4% de su capacidad total, frente al 72% registrado el 1 de julio.
Las reservas son superiores a las del año pasado por estas fechas (26.385 hectómetros cúbicos) y la media de los últimos 10 años (26.090).