Manos libres para el coche

Utilizar un teléfono móvil mientras se conduce, aún sin tener que sujetarlo, puede impedir una conducción segura
Por EROSKI Consumer 9 de enero de 2006

Son muchas las personas que aprovechan los desplazamientos en coche para hacer llamadas por el móvil. Pero este hábito, además de causar accidentes porque distrae la atención del conductor, se sanciona con tres puntos menos en el carné de conducir y una multa.

La solución pasa por hacerse con un manos libres que, como su nombre indica, permite al conductor hablar por el móvil a través de un micrófono y un altavoz sin tener que sujetar el teléfono. Los modelos más innovadores son inalámbricos, recargan el móvil e incluso silencian el volumen de la radio cuando se inicia una conversación telefónica.

El manos libres clásico consta de dos partes: Por un lado, una pieza que se conecta al mechero del coche, en la que se enchufa el móvil y va instalado el altavoz. Por otro lado, a esa pieza se conecta un cable en cuyo extremo se encuentra un pequeño micrófono, que se colocará en un punto a la altura de la cara, como puede ser la visera. Este modelo primitivo se ha ido sofisticando paulatinamente, integrando el micrófono en la misma pieza que el altavoz, ha reducido su tamaño, aumentado el alcance y reducido el nivel de ruido.

Además de todo ello, los manos libres más actuales son inalámbricos gracias a la tecnología bluetooth. Incorporan además opciones de lo más variadas y prácticas para que el uso del móvil interfiera lo mínimo en el acto de conducir. Entre otras muchas, destaca la posibilidad de silenciar la radio, la marcación de números de teléfono mediante la voz y un alcance de hasta diez metros. Además, su tamaño es realmente reducido para no estorbar a los pasajeros, y son cada vez más estéticos.

Hay un modelo de manos libres específico para cada modelo de móvil. Por la desventaja que supone para personas con más de un móvil o familias que usen el mismo coche, son muy populares los modelos universales que son compatibles con cualquier móvil cambiando tan sólo un pequeño conector. Universales o no, casi la totalidad de manos libres cumplen otra función realmente práctica: recargan la batería del móvil, muchos incluso con el motor apagado.

Los precios de los manos libres oscilan entre los 50 euros de los modelos más básicos y antiguos, a los más de 200 euros que cuestan los modelos más innovadores. Este producto se adquiere en cualquier tienda de telefonía, así como por Internet, entrando en tiendas «online» de telefonía como www.antzup.com o www.movizonia.com.

Otro paso adelante es el lanzamiento al mercado de manos libres específicos para conductores de motos. El dispositivo (compuesto por un micrófono y un pequeño auricular) se encaja a la perfección en cualquier tipo de casco y, gracias al gran alcance que permite el bluetooth, el móvil puede llevarse en el móvil o en el bolsillo sin que ello afecte a la calidad del sonido. Debido a la reciente aparición de este aparato, los precios son todavía elevados, rondan los 150 euros.

De todas formas, un estudio llevado a cabo en la Johns Hopkins University, en Baltimore, Estados Unidos, señala que utilizar un teléfono móvil mientras se conduce, aún cuando se haga a través de un sistema de manos libres, puede impedir una conducción segura.

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