El propietario de un restaurante chino ha confesado ser el responsable del envenenamiento de unas 500 personas, de las que 38 han muerto, en un restaurante de comida rápida en China.
Chen Zhenping fue detenido el pasado domingo, al día siguiente de la epidemia que afectó a varios cientos de personas, en su mayoría niños y obreros, que habían desayunado tortas de arroz en un restaurante de Tangshan, en la ciudad de Nanjing.
Chen confesó que, celoso del éxito de su competidor, envenenó con matarratas la pasta, el arroz y el sésamo con que se fabricaron las tortas.