Un estudio realizado por el Hospital Sagrat Cor en colaboración con el Hospital Clínic de Barcelona, que va a publicar la revista «European Respiratory Journal», ha revelado que la frecuencia de apneas durante el sueño está relacionada con el riesgo que tienen de morir las personas que sufren infarto cerebral. Cuántas más apneas, más riesgo.
Los médicos estudiaron a las personas que acudieron al Servicio de Urgencias del Sagrat Cor de Barcelona después de haber sufrido su primer infarto cerebral o un ataque isquémico transitorio que puede producirse antes de un verdadero infarto.
Los 161 enfermos que han participado en el estudio rellenaron, tras abandonar el hospital, unos cuestionarios sobre las apneas. En ellos, se definía a éstas como paros de un mínimo de 10 segundos o una caída del oxigeno en sangre superior al 2%.
Una vez rellenados todos los cuestionarios, los doctores hallaron el índice de apnea, para determinar la gravedad y la frecuencia. De los encuestados, 116 superaron los 10 puntos del índice, lo cual se considera un índice anormal, y 45 superaron los 30. Tras un seguimiento de 2,5 años, un total de 22 pacientes fallecieron a consecuencia de un segundo infarto.
Las conclusiones de los expertos revelaron que el peligro de muerte aumenta un 5% con cada incremento de unidad en índice de apnea del sueño que presentaban los enfermos. Así, los 45 enfermos con infarto cerebral que superaron los 30 puntos de índice de apnea tenían el doble de riesgo que los 116 que presentaban 10 puntos.
Tras ello los responsables del estudio han señalado que «la intensidad de las apneas es un nuevo factor de riesgo de morir como consecuencia de un infarto cerebral», por lo que «las medidas actuales para normalizar la respiración nocturna podrían reducir la mortalidad de esta segunda patología».
