Una cápsula dirigible con una minicámara promete revolucionar el diagnóstico endoscópico

Permite acceder a todo el tracto digestivo sin necesidad de anestesiar al paciente
Por EROSKI Consumer 29 de enero de 2008

Investigadores del departamento de Ingeniería Biomédica de la Universidad de Washington (Estados Unidos) han creado una cápsula dirigible por control remoto de tan sólo 18 milímetros de longitud con una minicámara de alta resolución dentro, que está llamada a revolucionar el campo de la diagnosis endoscópica. Todo el sistema es de muy bajo coste, comparado con las cámaras endoscópicas actuales, aunque sus creadores esperan poder rebajarlo aún más.

La cámara, conectada a un cable de sólo 1,4 milímetros de diámetro, está dotada de un ojo de pez electrónico capaz de captar imágenes en un ángulo de 180 grados. Dispone de un cable de fibra óptica cuya misión es iluminar el recorrido endoscópico que realiza con haces de luz láser azul, rojo y verde, de manera que cubre todos los colores del espectro, y otros seis cables de fibra óptica destinados a recoger y transmitir las imágenes a la pantalla de un ordenador en dos dimensiones y a todo color.

El uso de esta cápsula no precisa de anestesia, ni siquiera de sedación, ya que su reducido tamaño y facilidad de manejo no suponen mayores inconvenientes para el paciente. Su radio de acción va desde la cavidad bucal hasta el ano, siendo su principal campo de aplicación el intestino delgado, el más difícil de explorar por su complicado acceso y su longitud.

Control remoto

En la actualidad, existen en el mercado desde hace algunos años varios modelos de cápsulas endoscópicas -como la PillCam, la PillCam ESO y la Patency-, pero ninguna de ellas es guiada por cable y todas tienen un tamaño considerablemente superior. Además, a diferencia de estas, la diseñada por los expertos de la Universidad de Washington puede ser dirigida a voluntad por los técnicos que realicen la endoscopia. Se puede usar no sólo para la diagnosis, sino también para suministrar medicamentos al paciente en el lugar preciso, evitando así efectos adversos en el resto del organismo.

Los creadores de este ingenio no descartan otros posibles usos en el futuro. De hecho, afirman que dada la alta resolución de la minicámara y su manejabilidad estaría especialmente indicada para la detección de úlceras, hemorragias de etiología desconocida, malformaciones vasculares y tumores de todo tipo.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube