La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha alertado a los consumidores de la posible toxicidad del zumo de noni (fruta tropical) de la marca «Tahitian Noni». Este zumo podría estar relacionado con la muerte de un hombre de 40 años y la intoxicación de su mujer, que permanece ingresada en estado muy grave, en la localidad de Ojigares (Granada), según informó la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía.
El producto, que fue adquirido a través de Internet, lo comercializa la empresa estadounidense Tahitian Noni en botellas de cristal de un litro de capacidad. Las autoridades sanitarias tratan de determinar en estos momentos el lote y la fecha de caducidad del zumo que ingirió el fallecido y su mujer.
En el envase se indica que deben ingerirse 60 mililitros diarios de este zumo «exótico y saludable», al que se atribuye un alto nivel de antioxidantes y propiedades relacionadas con la longevidad, para sentirse «fabuloso» en sólo ocho días. La empresa fabricante, cuya sede central en Europa se encuentra en Alemania, ha asegurado que su producto está autorizado por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, sus siglas en inglés) y ha pasado los controles sanitarios tanto en Tahití, isla productora de la fruta, como en los países donde se embotella.
El producto se puede comprar por Internet o a través de comerciales que trabajan de manera independiente
Una portavoz de Tahitian Noni ha señalado que la empresa colabora con las autoridades españolas para determinar las causas del fallecimiento del hombre de Granada tras consumir dicho zumo. Las pesquisas se centran en identificar el número de lote de la botella, con el objetivo de conocer su procedencia.
El zumo de noni se puede comprar por Internet o a través de comerciales que trabajan de manera independiente y cobran comisiones por las ventas efectuadas.
Datos ilegibles
La AESAN afirma que por ahora no ha sido posible conocer el número de lote ni la fecha de caducidad del producto, puesto que estos datos «aparecen ilegibles en la botella», y está a la espera del resultado de los análisis que lleva a cabo el Instituto de Toxicología.
La Agencia de Seguridad Alimentaria asegura que «es bastante improbable» que se trate de un problema generalizado
En cualquier caso, asegura que «es bastante improbable» que se trate de un problema generalizado, aunque como medida de precaución aconseja a aquellos ciudadanos que tengan en su casa algún envase similar que se abstengan de consumirlo. Recomienda además que se evite adquirir productos que no estén correctamente etiquetados en español y en los que no figure el nombre y dirección del fabricante, descripción del producto, fecha de caducidad, o consumo preferente y lote.