El Parlamento Europeo ha presentado una propuesta de revisión del nivel máximo que deben contener productos como los dulces y los refrescos, en concreto del aditivo alimentario E 425 konjac
La comisión de Medio Ambiente ya ha presentado su apoyo a la propuesta de la Comisión Europea de prohibir de manera permanente el uso del aditivo alimentario E 425 konjac. Actualmente este aditivo está destinado a la fabricación de cápsulas de gelatina, usadas en productos de pastelería.
Su uso está en suspenso desde el mes de marzo de 2002, momento en el que se prohibió su comercialización en artículos de confitería al considerar que podía suponer un riesgo de muerte por asfixia, según informa el Parlamento. Ahora, el organismo ha presentado una enmiendo en la que propone una revisión de la Directiva comunitaria en un plazo de tres años.
Durante este periodo, la enmienda propone al ejecutivo comunitario una revisión para adecuar las dosis de aditivos a niveles máximos basados en los efectos de salud para la población infantil, considerado uno de los sectores de población más susceptibles por su mayor consumo de refrescos, pasteles y dulces.
La ponente Marit Paulsen apuesta por un mayor control en el uso de este tipo de aditivo con el fin de conocer con rigurosidad científica el impacto sobre la salud derivado de un consumo elevado de productos químicos.
