La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado un documento en el que se establecen mecanismos destinados a minimizar el riesgo potencial sobre actos terroristas destinados a contaminar alimentos.
A pesar de que no existe una evidencia específica sobre la existencia de un ataque de esta naturaleza, la OMS ha presentado un documento bajo el nombre «Amenazas Terroristas contra alimentos: Guía para el establecimiento y refuerzo de Sistemas de Prevención» en el que se advierte que la introducción de pesticidas, virus y parásitos en alimentos puede hacerse «de manera deliberada de dañar a poblaciones civiles».
El documento va dirigido especialmetne a los gobiernos e industrias alimentarias. Según el texto, estos dos grupos deberían aprobar nuevas medidas de lucha contra las emergencias de terrorismo alimentario, así como de aumentar la capacidad de reducir el aumento de este tipo de contaminación. El objetivo es, pues, que gobiernos y sectores implicados incrementen su vigilancia y medidas de respuesta en casos de emergencia.
De momento ya han suscrito el documento agencias nacionales de Australia, Alemania, Irlanda, Japón, Rusia, España, Reino Unido, EEUU, la Comisión Europea y la Organización de Agricultura y Desarrollo Industrial del Consejo de las Naciones Unidas. El objetivo es evitar ataques intencionados como el ocurrido en Oregón hace unos años, donde una epidemia de Salmonella afectó a un total de 750 personas tras la contaminación, por parte de miembros de una secta, de ensaladas servidas en un restaurante, informa la OMS.
