Diez propuestas solidarias para despedir el año

Recaudaciones familiares, un día de voluntariado, cocinar con ingredientes de comercio justo o aprender a decir "feliz año" en lengua de signos son opciones solidarias para despedir el año
Por Azucena García 31 de diciembre de 2013
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Imagen: arrtx1

El año termina y, antes de que lo haga, todas las personas pueden dedicar un momento a la solidaridad. En este artículo se recogen diez gestos sencillos para conseguirlo. En Navidad podemos apoyar a quienes necesitan ayuda, ejercer como voluntarios, colaborar con pequeñas donaciones destinadas a proyectos humanitarios, divertirnos en familia con juegos cooperativos que fomentan la unión o contribuir a la sensibilización sobre distintas causas. Incluso las uvas de fin de año pueden ser solidarias. Conseguir una Navidad diferente es muy fácil. Basta con proponérselo.

1. Filtro solidario para fotografiar las comidas y cenas de Navidad

Comidas y cenas familiares, con amigos, compañeros de trabajo o de clase, casuales, programadas con antelación… En estas fechas se suceden los momentos de reunión alrededor de la mesa y, casi seguro, la mayoría se inmortalizan en una fotografía. ¿Por qué no hacer lo mismo con los platos? Manos Unidas propone utilizar el Food Share Filter. Este filtro de Instagram permite destinar la recaudación de su descarga a los programas de ayuda contra el hambre de Manos Unidas. La aplicación se descarga en la App Store o en Googe Play, se saca la fotografía, se aplica el filtro solidario y se comparte la imagen en Instagram.

2. Organizar una recaudación solidaria entre los invitados

No solo se puede compartir mesa, sino también ilusión. Las reuniones habituales de Navidad son el momento idóneo para recaudar fondos que se destinarán a un proyecto solidario en el que alguno de los invitados esté implicado o bien en el que todos se quieran implicar. Si se cuenta con espacio, es posible organizar una fiesta para aumentar la recaudación o aprovechar el encuentro para dar a conocer la idea y crear luego una acción de crowdfunding que los invitados darán a conocer entre sus amistades para lograr una mayor colaboración. Plataformas como Lánzanos o Goteo permiten crear este tipo de iniciativas.

3. Cocinar un postre con ingredientes de comercio justo

El postre es uno de los platos fuertes de los menús en Navidad. Se puede probar a cocinar una tarta casera y emplear para la elaboración productos de comercio justo tan sabrosos como el azúcar, el cacao o los frutos secos, tres ingredientes que harán las delicias de todos los comensales. «El recetario más dulce del Comercio Justo» incluye una docena de recetas elaboradas con ingredientes de comercio justo, donde se hace especial hincapié en el azúcar. Este ingrediente ha sido este año el protagonista del Día Mundial del Comercio Justo, cuando se recordó que gracias a este producto se permite que «los campesinos sean actores protagonistas del desarrollo».

4. Ser voluntario en un comedor social

Los comedores sociales se llenan estos días de personas con necesidades a quienes se puede ayudar con un plato de comida caliente, con un abrazo y un rato de conversación. En la mayoría de las localidades hay un comedor al que se puede acudir a prestar ayuda. La red de Cáritas gestiona estos centros, que ahora más que nunca permanecen abiertos para atender las necesidades de cientos de personas. Los comedores sociales son estos días el único lugar donde muchas disfrutan de un plato de comida caliente. Cada vez más personas carecen de un hogar y el perfil de quienes se ven obligados a vivir en la calle ha cambiado. Son personas más jóvenes y de nacionalidad española, frente al perfil de hace pocos años, cuando las personas inmigrantes y de más edad eran mayoría.

5. Aprender a decir «feliz año» en lengua de signos

La Lengua de Signos Española (LSE) es un modo de comunicación que permite la integración de las personas sordas y sordomudas. En un gesto de apoyo a esta integración, se puede aprender a felicitar el año en LSE e incluso, en Lengua de Signos catalana.

6. Uvas y cepas solidarias

La Asociación Española contra el Cáncer es la artífice del proyecto uvas solidarias, una línea de uvas por cuya venta se destinará una parte a acciones de prevención del cáncer. Quienes lo prefieran podrán apadrinar una cepa por un coste único de 45 euros anuales, que la Fundación Emilio Moro destinará a proyectos humanitarios y de la Federación Española de Bancos de Alimentos.

7. Juegos cooperativos para divertirse en familia

Las sobremesas son el momento idóneo para jugar en familia. Por ello se pueden aprovechar para proponer un juego cooperativo. Estos promueven el trabajo en equipo y la colaboración, además de ser juegos en los que nadie pierde. Ekilikua dispone de juegos cooperativos«dos en uno», que por un lado son un juego y por el otro, una lámina decorativa para colocar en el cuarto de los niños. Cada uno se centra en valores como la igualdad y la ecología y están fabricados de acuerdo a parámetros de respeto al medio ambiente.

8. Vestir una prenda roja de algodón orgánico

El algodón orgánico es un producto ecológico, pero también solidario, si se aprovecha la tradición de despedir el año con una prenda roja elaborada de acuerdo a los principios del comercio justo. En muchas tiendas es posible encontrar textiles que se adecuan a estas características. Además, varias marcas elaboran ropa interior de algodón orgánico, como «Pants to poverty» (ropa para la pobreza), cuyas prendas se fabrican con algodón de productores indios. En la producción se respeta el medio ambiente y se cuida que los beneficios reviertan en la comunidad. En la actualidad, 15.000 agricultores de unas 1.000 aldeas, agrupados en 13 cooperativas, se encargan de la producción del algodón empleado en la confección de las prendas.

9. Productos con etiquetado en braille para concienciar

Se puede plantear como un juego: vendar los ojos a los comensales y proponerles escoger un producto con etiquetado en braille, el cual habrán de descubrir. Otra opción es proponer a cada uno que acuda a la cena con un producto etiquetado de este modo, para que sean conscientes de las dificultades con que se topan las personas con discapacidad visual y reflexionen sobre qué harían en su lugar.

10. Enviar un mensaje solidario

En nochevieja se registra el mayor tráfico de mensajes, mucho más que ninguna otra noche. ¿Por qué no hacer que uno de esos mensajes sea solidario? Varias ONG disponen de esta opción. Por tan solo 1,20 euros se colabora con distintas causas, en función del número al que se envíe el mensaje. Los sms solidarios se transforman en donativos para programas de desarrollo y ayuda humanitaria, adquisición de medicamentos, atención sanitaria, educación, alimentos o atención en emergencias.

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