Prima de comercio justo, un pago adicional para pequeños productores

Junto con el precio de sus productos, las organizaciones de productores reciben una prima que se invierte en desarrollo económico, social o ambiental
Por Azucena García 23 de octubre de 2012
Img primacomerciojusto list

La prima de comercio justo supone una ayuda extra para las organizaciones de pequeños productores. Además de recibir el pago de sus productos, estos se benefician de una cantidad adicional para invertir en el desarrollo económico, social o ambiental de las propias organizaciones y la comunidad. Estas deciden el fin de la prima, sin intermediarios. La cantidad que se les abona se fija en un porcentaje, por unidad vendida, y sale del bolsillo de quien adquiere los productos. En este artículo se explica en qué consiste esta prima, cómo se decide su destino y algunas buenas prácticas.

Prima de comercio justo, qué es

La prima de comercio justo es «una herramienta para el desarrollo socioeconómico y para el empoderamiento»

Cada vez que un consumidor adquiere un producto de comercio justo consigue, como mínimo, dos beneficios para el productor: por un lado, este recibe el importe del artículo adquirido y, por otro, una cantidad adicional para invertir en acciones de desarrollo económico, social o ambiental. Esta última se denomina prima de comercio justo y pretende ser «una herramienta para el desarrollo socioeconómico y para el empoderamiento», señala Fairtrade España.

Los agricultores y trabajadores del sistema Fairtrade tienen garantizada esta prima para el desarrollo. Fairtrade International (FLO) es la organización encargada de establecer los niveles de la prima. Esta «no es negociable», aclara, y oscila entre el 5% y el 30% del precio mínimo. Todas las primas de todos los productos se pueden consultar en la página web de Fairtrade International.

La prima se paga por cada unidad de producto vendido. De ahí la importancia de que los consumidores adquieran productos de comercio justo, puesto que con sus compras contribuyen a mejorar la calidad de vida de los productores. Y es que la prima no se abona de manera nominal, sino a la organización.

A qué se destina la prima de comercio justo

Los productores deciden el destino de la prima, aunque han de justificar todos los pagos y examinar el progreso del proyecto

El destino de la prima de comercio justo se decide según el criterio de las organizaciones de productores. Nadie les impone cómo usarla o invertirla, aunque sí se exige, recuerda Fairtrade, que la selección del proyecto y el manejo del dinero «se haga a través de procesos transparentes, participativos y democráticos». Los proyectos pueden fomentar el desarrollo de la comunidad o los propios negocios.

En este último aspecto, los productores toman sus decisiones. Esto supone que la prima sea un instrumento de empoderamiento, al permitirles decidir su destino. Durante el primer año de certificación Fairtrade evalúan sus necesidades, analizan cómo emplear mejor los beneficios, realizan propuestas y las votan para elaborar el plan anual de la prima, un proyecto consensuado y que ha de contar con el visto bueno de los productores. Aunque se elija a los representantes de los productores, todos han de poder decidir sobre el destino de la prima.

Este plan anual es una pieza clave en la transparencia de la prima. En él se recoge en qué se empleará la prima y cómo, se destacan los objetivos que se persiguen y el presupuesto que se requiere para conseguirlos. Una vez elaborado, la asamblea general aprueba este documento, los productores lo ponen en marcha y presentan toda la documentación, como facturas y recibos, que acredite las inversiones y acciones llevadas a cabo.

El seguimiento incluye el monitoreo de los proyectos, de manera que se evalúen los progresos y se compruebe que consiguen los logros perseguidos. De igual modo, es una manera de detectar posibles errores para subsanarlos a tiempo, así como evitar que los gastos se disparen y se sobrepase el presupuesto.

Buenas prácticas en el empleo de la prima

En África, las organizaciones de productores de comercio justo invierten la prima en proyectos sociales, de protección al medio ambiente, sanidad o desarrollo del negocio. Y así lo cuentan en una página web donde recogen buenas prácticas en el uso de la prima relacionadas con cuatro ámbitos: negocios, medio ambiente, social y salud.

  • El té no es un negocio estable, en especial, para los productores de Rukuriri Tea Factory, en Kenia. Las condiciones climáticas y la fluctuación de los precios complican la estabilidad de los ingresos, por lo que se optó por invertir la prima de desarrollo en otro sector: la producción de leche. Esta decisión respondió al hecho de que este es el país donde se consume una mayor cantidad de leche. El éxito ha sido tal, que incluso los ingresos de algunos agricultores son superiores por la venta de leche que por el comercio del té.

Img usoprimafairtradeproyectomedioambientemzuzutrabajador
Imagen: Fairtrade España
  • Otro caso de éxito es el abanderado por la cooperativa Mzuzu Coffee Planters Cooperative Union, de Malawi. Con 3.500 socios, reduce el impacto negativo del cambio climático sobre las cosechas. Ha invertido la prima en la formación de los productores para que aprendan a aplicar nuevos métodos que frenen la erosión de los terrenos destinados a los cafetales, una acción para la que ha conseguido fondos adicionales de la Unión Europea y otras fuentes.

  • Comprar tiempo de emisión en la radio. Este es el destino de la prima de US-GPC Saraya, de Senegal, dedicada a la producción de algodón. Se eligió este medio por ser uno de los más influyentes y accesibles en el continente. A través de un espacio periódico, se dedica tiempo a transmitir a los miembros de la organización cuestiones sobre agricultura, salud, meteorología o alertas sanitarias.

Img hospitalcomerciojusto art
Imagen: Fairtrade España
  • La atención durante la maternidad evita complicaciones en este periodo, así como en el momento del parto, ya que se garantiza la salud de la madre y del bebé. Sin embargo, no todas las mujeres reciben esta atención. Conscientes de ello, un grupo de mujeres trabajadoras de una empresa de Naivasha, en Kenia, puso en marcha la construcción de un centro de cuidado sanitario para mujeres con salas y habitaciones para partos, una sala de alto riesgo, guardería completa, dos quirófanos y dos salas de recuperación. El proyecto contó con el apoyo de otros profesionales y voluntarios, si bien la empresa a la que pertenecen las mujeres, Flores Panda, aportó parte de la prima para esta obra.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube