Las empresas son cada vez más solidarias. Según datos del Observatorio de Voluntariado Corporativo, el 69% de las compañías hacen actividades de voluntariado corporativo y un 33% llevan entre tres y seis años desarrollándolas. El voluntariado corporativo favorece a los empleados que mejoran sus habilidades y autoestima, a la firma que gana en imagen y reputación y a la ONG que se beneficia de los recursos que la firma aporta y que revierte en la sociedad. El artículo muestra las razones que llevan a las empresas a hacer voluntariado corporativo, los beneficios y las dificultades que se encuentran y el papel protagonista que han adquirido con la nueva Ley de Voluntariado.
¿Por qué una empresa participa en un programa de voluntariado?
El voluntariado corporativo se plantea como una herramienta más de la estrategia de RSC
Hay obligaciones legales que las empresas han de cumplir como las normativas medioambientales, la no discriminación a sus trabajadores o clientes por motivos de sexo, raza, etnia, condición física, edad, orientación sexual, etc. Pero además de esta línea roja que no pueden traspasar, hay negocios con mayor compromiso social y medioambiental. Su contribución a la solución de los problemas básicos de la humanidad es fundamental, de ahí que se dé protagonismo a las compañías en los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible, asumiendo que con el impulso de los gobiernos no es suficiente.
Las razones que llevan a las empresas a hacer voluntariado corporativo podrían resumirse en motivaciones de:
- tipo filantrópicas.
- posicionamiento externo (imagen de marca, fidelización de clientes, incremento de ventas y competitividad).
- reputación interna (captación y retención del talento, mejora del clima de la organización, desarrollo de capacidades de los empleados, orgullo de pertenencia y satisfacción de una demanda de los trabajadores).