A pesar de que 2013 ha sido un año de relativo estancamiento en el mercado de la tecnología doméstica, las tabletas se encuentran en expansión. Ya han dejado de ser un objeto de lujo, o profesional, para constituir una relativa necesidad doméstica. De hecho, para muchas personas hoy en día es más útil tener una tableta que un ordenador portátil y que, desde luego, un sobremesa. Así que seguro será uno de los regalos estrella de estas Navidades. Sin embargo, la oferta es tan amplia que conviene pensar bien para quién será este dispositivo si se quiere de verdad acertar. No todos los públicos tienen las mismas necesidades, pero, por fortuna, se pueden acotar las características del aparato a casi cada perfil según la edad, los usos, las pulgadas, el sistema operativo… Este artículo ofrece algunos consejos para que nos podamos lucir si nos decidimos por una tableta como obsequio navideño.
La edad
Las tabletas pueden tener destinatarios muy variados, cada uno con su perfil. No es lo mismo regalar una tableta a un adulto entre los 14 y los 50 años, que a un niño o una persona mayor.
Hay una gama de tabletas idóneas por su buen precio, entre las que se encuentran marcas especializadas en los más pequeños, con modelos que cubren sus necesidades y optimizan las capacidades interactivas de la pantalla. Además, su coste es más razonable que el de los dispositivos para mayores. Entre ellos figuran las tabletas Paquito Mini y Super Paquito.
En un niño cuentan variables como el peso del aparato y sus dimensiones, así como la complejidad del entorno gráfico
En un niño cuentan variables como el peso del aparato y sus dimensiones, así como la complejidad del entorno gráfico. Y lo mismo sucede con una persona mayor. Para esta, los modelos más pesados pueden ser incómodos, pero también algunos ligeros con demasiadas funciones. A veces es mejor un aparato ligero y con un entorno claro y sencillo para que puedan practicar y aprender, si es que de eso es de lo que se trata. En este sentido, el iPad Mini de la generación anterior, que se vende por menos de 300 euros, podría ser el indicado.
Pero si lo que queremos es regalar una tableta a un adulto capaz de sacarle el máximo rendimiento, solo nos veremos limitados por nuestro poder adquisitivo. No debemos engañarnos: un joven que es casi nativo digital le encontrará mucho más potencial de uso a la tableta que un adulto de edad media, puesto que está mucho más familiarizado con la tecnología. Dado que este tipo de jóvenes muchas veces tienen que hacer deberes con un ordenador con teclado, puede ser buena idea optar por un modelo híbrido basado en Windows 8, o bien comprarle accesorios que conviertan la tableta en un ordenador.
Si el destinatario de nuestro regalo es una persona de edad media, debemos optar por diseños bonitos
Si el destinatario de nuestro regalo es una persona de edad media, debemos optar por diseños bonitos y tabletas de última hornada, ya que esta franja de edad valora más estos aspectos. El iPad Air es un buen candidato a satisfacer expectativas, pero también lo son el Kindle Fire HDX o el Surface Pro 2, un híbrido de tableta y ordenador con un precio elevado pero muy buenas prestaciones.
Los posibles usos
De nuevo debemos analizar el uso que el homenajeado le dará a su nuevo aparato. Está claro que un niño querrá jugar e interactuar con la pantalla, pero tal vez también conviene que su tableta tenga un navegador para que empiece a buscar cosas en Internet.
Lo mismo pasa con un joven: quizá haya que comprar un dispositivo potente para que pueda jugar con gráficos complejos, pero no desechemos que lo utilice para informarse o compartir contenidos en redes sociales; en este sentido, es importante que la tableta permita hacer fotografías y grabar vídeos.
¿Más o menos pulgadas?
Si lo que se quiere es una tableta para salir de casa y poder usarla en sus diversas variantes, lo más cómodo son los modelos ligeros
Un adulto la usará más para informarse y leer de un modo pasivo libros electrónicos y también tal vez, para ver series y películas, por lo que es idóneo que tenga un formato más bien cuadrado, como el 4:3, y una buena superficie de pantalla. Además, deberá contar con una buena definición de pantalla. A este respecto, los últimos modelos de tabletas en 10 pulgadas, como Kindle Fire HDX y iPad Air, están entre los más recomendables, como también el Samsung Galaxy Tab 3 o el Nexus 10.
Pero si lo que se quiere es un dispositivo para salir de casa y poder usarlo en sus diversas variantes (desde leer libros a navegar con ella o ver vídeos), lo más cómodo son los modelos ligeros de siete pulgadas como el iPad Mini. Pero puede ser acertado tender a los formatos rectangulares, como el 16:9, porque caben mejor en la mano, como los de la gama Nexus 7.
¿Android, iOS o Windows 8?
En la actualidad, apenas hay diferencias entre uno u otro sistema operativo, por lo que esta decisión estará muy determinada por los otros aparatos que emplee el destinatario del regalo. Si tiene un ordenador con Windows 8, puede ser buena idea optar por este sistema, para que pueda sincronizar contenidos; aunque esta no es una norma fija. Lo mismo ocurre con Apple. Por otro lado, si nos decantamos por Android, tenemos la ventaja de que disponemos de una oferta de tabletas mucho más amplia.
¿De marca reconocida o de marca blanca financiada por una operadora?
Este es un apartado peliagudo, porque si bien las marcas blancas que ofrecen algunas operadoras de telecomunicaciones tienen modelos tan buenos como los de los fabricantes (muchas veces son los mismos), podemos tener problemas en el caso de que el aparato salga defectuoso y no nos cubra algún tipo de garantía. Una marca reconocida siempre se verá presionada, por su reputación, a solucionarnos el asunto con mayor celeridad. Por otro lado, la operadora siempre ofrecerá condiciones económicas más ventajosas.
¿Con o sin 3G/4G?
Los modelos que tienen solo wifi son apropiados para casa. Pero si sabemos que el destinatario de la tableta la usará en movilidad, no es mala idea apostar por la conectividad 3G/4G, si bien esta sube el precio del aparato de forma sensible. En general, en niños o jóvenes, será mejor optar por la conectividad wifi, pues prefieren el smartphone para conectarse en movilidad.
