Las agencias de viajes piden avales bancarios ante las recientes quiebras de compañías aéreas

Amenazan con boicotear a las aerolíneas si no se alcanza un acuerdo en tres meses
Por EROSKI Consumer 16 de febrero de 2003

La Cúpula Asociativa de las Agencias de Viajes Españolas (CAAVE) ha remitido una carta a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) en la que pide avales financieros ante las quiebras de las compañías aéreas, según informó el presidente de las agencias de viaje de Cataluña, Enrique Fernández de Alarcón. Fernández explicó que «estamos ante una indefensión absoluta y enormemente desencantados» ante el cese de operaciones de compañías como Sabena, Debonair o Swissair.

Las agencias de viajes españolas han dado a la IATA un plazo de tres meses para negociar los avales y, si una vez transcurrido estos meses no se alcanza ningún acuerdo, amenazan con tomar medidas como el boicot a las compañías aéreas. «Podríamos protestar sin vender ningún billete un día a la semana o un día cada quincena», explicó el empresario, y añadió que «al igual que las aerolíneas piden avales bancarios a las agencias por si cerramos, si pasa a la inversa nosotros no tenemos dónde agarrarnos».

Según Fernández, «las compañías aéreas nunca se quedarán sin cobrar si cierra una agencia de viajes, el agente sí». A su juicio, «hace años era impensable el cierre de una compañía aérea y más de la categoría de Swissair o Sabena, pero ahora la situación ha cambiado y empeorará si estalla la guerra con Irak».

«Todas las agencias de viajes españolas hemos querido enviar una carta a IATA-España en la que decimos que o pone en práctica avales para las compañías aéreas o que nos quite a nosotros los avales», añadió.

En este sentido, explicó que «cuando quiebra una compañía y los clientes nos llaman porque el avión no sale, saco el billete, lo pago y espero a que IATA me llame para que lo abone, pero a lo mejor o no lo cobras nunca o dentro de tres años».

«Si el viajero no pasa por la agencia y compra el billete en la compañía, en caso de quiebra tiene que sacar otro billete, pagarlo y reclamar a la compañía, pero mientras tanto lo has puesto de tu bolsillo». Según Fernández, «cualquier compañía aérea puede reventar en cualquier momento».

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