Los alimentos con denominación de origen son productos de gran calidad y tradición gastronómica. El hecho de pertenecer a una zona geográfica concreta, confiere a estos productos unas características exclusivas que no poseen los de otras zonas, ya que la tierra, el clima y otros muchos factores naturales son determinantes de sus propiedades y calidad.
Requisitos muy concretos
Los alimentos con denominación de origen se caracterizan porque su producción, transformación y elaboración ha de realizarse en una zona geográfica determinada, con unos conocimientos específicos y comprobados. Sólo mediante el cumplimiento de dichos requisitos, un producto podrá poseer el distintivo que lo clasifique como alimento con denominación de origen.
Un ejemplo de los requisitos que han de cumplir estos alimentos es el del queso Idiazabal. Este queso solo puede elaborarse en el País Vasco y Navarra, del mismo modo que la leche necesaria para su fabricación ha de producirse también en estas comunidades. Además, solo se puede emplear leche de oveja «latxa» y «carranzana», sin mezclarlas y sin pasteurizar. La maduración de este queso ha de ser al menos de tres meses y su contenido mínimo de materia grasa en torno al 45 %. Por último, el queso deberá superar pruebas tanto sanitarias como organolépticas, es decir, pruebas de sabor, aroma, textura, presencia… que garanticen la obtención de un queso inconfundible y de gran calidad.
En la compra
A la hora de adquirir un alimento con denominación de origen, conviene asegurarse de que el producto presenta de forma destacada y fácilmente visible el logotipo de la denominación, además de una contraetiqueta numerada que proporciona el Consejo Regulador. De esta forma el consumidor puede estar seguro de que realmente está comprando un alimento con denominación de origen.
Menú con denominación de origen
A lo largo de todo el país existen numerosos alimentos con denominación de origen pertenecientes a diferentes comunidades. Estos son principalmente quesos, carnes, frutas, verduras, productos de panadería y aceites, y su presencia en los establecimientos va aumentando cada día.
Gracias a la gran variedad de alimentos con denominación que posemos, resulta sencillo elaborar una «menú con denominación de origen» elaborado exclusivamente con este tipo de alimentos.
Se podría empezar con un buen plato de alcachofas de Tudela y continuar con una ternera Gallega acompañada de unas berenjenas de Almagro, para finalizar con un trozo de queso Manchego, todo ello regado con un buen Rioja. Un menú muy sabroso y de gran calidad.
