El café es una infusión más o menos concentrada del grano tostado y molido del café. Según la costumbre de cada persona, y del lugar dónde se encuentre, el café se toma a cualquier hora, desde el desayuno a la cena, y es casi obligado tomar un café después de la comida. Esta infusión combina perfectamente con leche y así sirve como base de desayunos y meriendas.
En España es usual mezclar el café con raíz de achicoria para darle más color, y también es muy común el preparado de café torrefacto, en lugar del café natural. El café torrefacto se obtiene al tostar los granos de café con azúcar. El producto resultante es un café más oscuro y con un sabor más fuerte.
Un buen café
Para que el grano del café no pierda propiedades, ni aroma ni sabor, debe guardarse en un recipiente hermético. Para conseguir un mejor café conviene moler los granos según la demanda, y no en grandes cantidades. Dado que el café tiene muchos componentes aromáticos y volátiles, el mejor café es que se prepara al instante y bien caliente, «recién hecho», ya que a medida que pasa el tiempo, pierde aroma y el sabor resulta más fuerte y concentrado.
Un café para cada gusto
- Espresso: Es un café concentrado, fuerte y espumoso elaborado de manera que el agua pasa forzada a través de una compacta capa de café. Sirve de base para otras preparaciones con café.
- Café con leche: Habitualmente para el café con leche se añade mitad de café y mitad de leche, salvo indicaciones concretas como «largo de café «o «corto de café «. En lugar de leche, se puede servir con crema de leche.
- Cortado: Es el café sólo con unas gotas de leche.
- Café soluble o instantáneo: Es un café deshidratado que se obtiene al volver a rehidratar la mezcla. El sabor y el aroma son distintos a los de un café recién hecho. Se emplea mucho por la comodidad y rapidez de su preparación.
- Café descafeinado: Se trata del café al que se le ha eliminado hasta el 97% de cafeína. Admite las mismas preparaciones que el café normal.
- Americano: Se le llama así al café espresso diluido en agua muy caliente.
- Vienés: Se trata del café sólo con unas cucharadas de nata montada.
- Cappuccino: Un tercio de espresso con un tercio de leche vaporizada y otro tercio de espuma de leche.
- Café helado: Se le conoce con este nombre al café granizado que se sirve junto con helado de vainilla.
- Blanco y negro: Es un café con leche merengada.
En la cocina se pueden preparar numerosas recetas elaboradas a partir de café, sobre todo en repostería y pastelería, como por ejemplo la crema de mantequilla de café, que es la base de la tarta de moka; la crema pastelera de café; soufflés y tartas; granizados y helados y hasta para empapar los bizcochos de un exquisito tiramisú, tal y como muestra la siguiente receta: tiramisú