El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Miguel Arias Cañete, anunció ayer que el Ejecutivo tiene previsto empezar a abrir las zonas de pesca y marisqueo cerradas en Galicia a causa del vertido de fuel del petrolero «Prestige» a partir del próximo 15 de enero, «siempre que den garantías de calidad en sus aguas y recursos pesqueros», precisó.
«El propósito es levantar la veda en las zonas afectadas de manera progresiva siempre que la calidad de las aguas y recursos pesqueros lo permitan», explicó Arias Cañete en una rueda de prensa convocada para hacer balance de las actuaciones de su Departamento en 2002.
Para certificar su calidad, el Ministerio realizará, en colaboración con la Agencia de Seguridad Alimentaria, controles de presencia de hidrocarburos y barridos en las zonas vedadas antes de decretar su apertura.
Las primeras zonas en recuperar la actividad serán las de marisqueo y pesca al sur de Cabo Finisterre y la fachada cantábrica a partir de Cabo Ortegal, mientras que habrá otras, entre las que el ministro citó la Costa de la Muerte, que tardarán «mucho más tiempo en abrirse».
Todas las comunidades autónomas del Cantábrico y Noroeste han establecido vedas temporales. En pesca de arrastre, el cierre comprende toda la franja costera de 12 millas desde la desembocadura del Miño, en la frontera marítima con Portugal, hasta Punta Candelaria en las proximidades de Cedeira y afecta a la pesca de bacaladilla, merluza, rape, gallo y cigala.
También está vedada la actividad pesquera con artes fijos en el mismo tramo en las aguas exteriores del caladero nacional, hasta las 200 millas, donde se captura merluza, rape, cigala, pulpo, congrio y salmonete. Para la pesca por cerco, la veda afecta a las aguas exteriores hasta las 200 millas desde la desembocadura del río Miño hasta la Punta de la Garita o de Ontón, en las proximidades de la localidad cántabra de Castro Urdiales, con pesca de anchoa, sardina, jurel y caballa.
Por otra parte, Arias Cañete anunció la decisión de aportar 31,6 millones de euros adicionales del presupuesto de Agricultura para paliar los daños del vertido del buque, que se suman a los 140 millones de fondos comunitarios aprobados en la Conferencia Sectorial extraordinaria de Pesca celebrada el jueves pasado.
Este presupuesto de más de 170 millones de euros «permitirá financiar las medidas necesarias económicas sin tensiones y durante un periodo razonable de tiempo, para poder recuperar la actividad pesquera con normalidad y de forma escalonada», apuntó el ministro.
Las medidas puestas en marcha absorben «cerca de 24 millones» al mes, de los que unos 20 millones van para Galicia, 300.000 euros a Asturias, 2 millones a Cantabria y otros 2 millones al País Vasco.
