Migraña por los excesos en Navidad

Aunque la causa primera no se conoce con exactitud, el estrés y los hábitos alimentarios pueden favorecer una crisis de migraña
Por Montse Arboix 31 de diciembre de 2014
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Imagen: CITAlliance

En Navidad las agendas están a rebosar de celebraciones y reuniones con amigos y familias que, además, vienen acompañadas de banquetes, cambios de horario y estrés. Las personas que lidian con la migraña el resto del año saben que solo uno de estos factores puede desencadenar una terrible crisis de migraña. Sin embargo, hay algunas acciones que ayudan a mantenerla a raya. Este artículo describe qué se puede hacer para controlar la migraña en Navidad y cuál es la situación de este intenso dolor de cabeza en España. También detalla qué recomiendan los expertos para mantener un cerebro saludable.

Cómo prevenir el dolor de cabeza en Navidad

Para que el dolor de cabeza no empañe comidas y celebraciones de Navidad, los especialistas insisten en no abandonar los hábitos saludables que se siguen el resto del año. Una de las primeras recomendaciones para disminuir la probabilidad de migraña es mantener el horario habitual de descanso nocturno, tanto como sea posible. Trasnochar y levantarse mucho más tarde de lo acostumbrado, para recuperar las horas de sueño, favorece el dolor de cabeza.

Aunque la migraña es una de las enfermedades más incapacitantes, muchos afectados no están diagnosticados o no reciben el tratamiento adecuado

También hay que ser moderados en la comida y la bebida, sobre todo, con el alcohol, ya que es uno de los inductores más importantes de migraña. Y si se bebe, siempre es mejor consumir mientras se come, ya que así se retrasa su absorción. Los expertos de la Sociedad Española de Neurología (SEN) indican que el consumo excesivo -que se considera en más de dos vasos de vino o tres copas de espumoso- aumenta el riesgo de sufrir migraña y otras cefaleas. El consumo de alcohol provoca crisis de migraña a entre el 30% y el 50% de las personas afectadas. Pero no solo el componente alcohólico predispone a ello: hay estudios que apuntan que sustancias como los fenoles y los taninos (que también se encuentran en el té, el café, las nueces y algunos quesos) también pueden causar migraña en algunos afectados.

Otro factor que hay que considerar es el edades comprendidas entre los 30 y 39 años, aunque también puede darse en la infancia -incluso hay casos reportados de recién nacidos afectados- y en mayores de 80 años. La migraña tiene un gran impacto en la calidad de vida, puesto que al 38% de los afectados, las crisis les impiden seguir con sus rutinas. Se calcula que los hombres pierden unos 3,9 días y las mujeres, 8,3 días de trabajo cada año. Asimismo, se encontró que la cifra de afectados difiere según la comunidad autónoma: la incidencia más baja se ha encontrado en Navarra (un 7,6% de los encuestados reconoció padecer un episodio de migraña en el último año) y la más alta, en Canarias (un 18%).

Sin embargo, aunque esta enfermedad está reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una de las más incapacitantes, muchos de los participantes en la encuesta PALM no estaban diagnosticados o no recibían el tratamiento adecuado, aspectos que hacen aumentar la tasa de automedicación.

10 recomendaciones para un cerebro saludable

Seguir un estilo de vida saludable ayuda a mantener a raya multitud de patologías: EPOC, enfermedades cerebrovasculares y cardiovasculares, diabetes o cáncer, entre otros. Sin embargo, no solo el pulmón y el corazón sufren los resultados de llevar unos hábitos insanos. El cerebro no se queda al margen. Por este motivo, la Fundación del Cerebro, con el aval social de la Sociedad Española de Neurología, ha desarrollado un decálogo para proteger el cerebro, que reza del siguiente modo:

  • 1. Practicar ejercicio físico cada día y evitar el sedentarismo.
  • 2. Evitar el sobrepeso.
  • 3. Mantenerse activo intelectualmente. La lectura, el cine y el teatro, aprender idiomas, mantener conversaciones interesantes o viajar ayudan a ello.
  • 4. Participar en actividades de grupo e interactuar en sociedad.
  • 5. Controlar la tensión arterial.
  • 6. Evitar la hiperglucemia y la diabetes.
  • 7. Adoptar una dieta sana, equilibrada y saludable, como la Dieta Mediterránea.
  • 8. Prevenir accidentes, sobre todo, de circulación, y utilizar cinturón de seguridad o casco.
  • 9. Abandonar el hábito tabáquico y reducir el consumo de alcohol (en España, es una de las primeras causas prevenibles de fallecimiento y el tercer factor de riesgo de muerte prematura y enfermedad)
  • 10. Mantener una actitud positiva. Los estudios muestran que factores de la personalidad, como la extroversión y el optimismo, son clave para disfrutar de una vida más longeva; de hecho, las personas optimistas siguen una alimentación más adecuada y hacen más ejercicio físico.
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