Un nuevo año son 365 nuevas oportunidades para cuidarnos y estar mejor

Si tienes un problema de salud, es fundamental que lleves al día tu tratamiento tal y como te lo ha pautado tu médico. Una buena adherencia al tratamiento mejorará su evolución. 

Si tienes un problema de salud crónico, como es el caso de una enfermedad respiratoria, cuando tomas tu tratamiento das pasitos de hormiga hacia una vida normal, pero no tomarlo supone dar pasos de elefante hacia atrás.

Muévete. Mantenerse activo físicamente hará que tu salud mejore. Aunque tengas síntomas, no pares de moverte y si no sabes cómo hacer ejercicio de forma segura, consulta con un especialista. Los fisioterapeutas especializados en salud respiratoria de la Fundación Lovexair pueden ayudarte si lo deseas.

Tener una buena salud mental es uno de los puntos más importantes para mantenernos saludables. Ejercita tu mente leyendo, escuchando música… Relájate y desconecta de los problemas. Queda con tus seres queridos y haz actividades que te gusten y estimulen.

Llevar una alimentación saludable hará que tu organismo disponga de todos los nutrientes necesarios para trabajar. No la descuides.

Sí, una vez más vas a escuchar que tienes que dejar de lado el tabaco y el alcohol u otro tipo de drogas. Cada vez que consumes alguna de estas sustancias estás dañando tu organismo. 

Si hablamos del tabaco te recordamos que cuando fumas es como si te estuvieras tomando un cóctel de amoníaco, acetona, alquitrán, mercurio, arsénico…. Y así hasta 6.000 sustancias tóxicas incluidas en el tabaco, independientemente de la forma en que lo presenten.

Un descanso de calidad ayudará a que tu cuerpo funcione de modo correcto.

Seguro que piensas que la teoría es muy fácil y que lo complicado es sacar tiempo cada día para llevar todo esto a la práctica. Pero no es tan difícil: solo tienes que introducir algunas actividades concretasen tu rutina diaria. Los coaches HappyAir dan unos ejemplos de cómo conseguirlo.

• Ponerte una alarma a la hora indicada.
• Dejar las medicinas en un lugar visible.
• Tomarlas justo antes de algo que hagas siempre, por ejemplo, antes de lavarte los dientes después de desayunar.

• Ir a los sitios andando y por el camino más largo.
• Dejar de lado los ascensores y usar las escaleras.
• Caminar por casa mientras hablas por teléfono.

• Haces pasatiempos como sopa de letras o sudokus. Juegas en el móvil a juegos con palabras, al tetris… O, si eres manitas, haces manualidades o bricolaje.
• Quedas con amigos para salir, no te quedes en casa, aunque el sofá te dé voces.
• Lees un buen libro. Seguro que hay algún thriller o historia de amor interesantes que están deseando que los leas.

• Dejar un lado las comidas ricas en grasas saturadas y azúcares y sal.
• Introducir alimentos como frutas y verduras en tus comidas. Si tu plato lo divides en cuatro partes, dos de ellas tendrían que ser verduras, una de hidratos (pasta, pan…) y otra de proteínas (carne, pescado…).
• Beber agua, en lugar de refrescos o alcohol.

• No tomar bebidas excitantes como el café o el té por la tarde.
• Dejar tus problemas fuera. No dediques el tiempo de estar en la cama a pensar en qué tienes que hacer mañana: ve a la cama cuando tengas sueño.
• Mantener la habitación a una temperatura adecuada; si está muy fría o hace mucho calor te costará descansar.

Al empezar el año tenemos 365 nuevas oportunidades para coger las riendas de nuestra vida y encaminarla hacia el lado saludable, pero cada día que pasa es una oportunidad que no vuelve. Así que no dejes para mañana lo que puedes cambiar hoy.

Si no sabes por dónde empezar y quieres que un profesional sanitario te ayude a cumplir tus propósitos de salud, te invitamos a que contactes con uno de nuestros coaches de forma totalmente gratuita.