Según datos de la Asociación de Víctimas de Talidomida, en España hay unas 500 personas con malformaciones causadas por este fármaco

La organización reivindica el mantenimiento de este producto en la ilegalidad
Por EROSKI Consumer 18 de febrero de 2004

Según datos de la Asociación de Víctimas de Talidomida en España, alrededor de 500 españoles sufren malformaciones en las extremidades generadas por medicamentos derivados de la talidomida, una sustancia que la Agencia Española del Medicamento (AEM) considera recomendable para tratar algunos cánceres, si bien precisa que su uso estaría restringido en embarazadas y siempre conociendo sus riesgos.

Estas afirmaciones de la AEM han levantado ampollas entre la mencionada asociación, que ha anunciado que emprenderá acciones judiciales si se rehabilita el empleo en nuestro país de este componente químico, que se prescribía para paliar los vómitos o los mareos típicos del embarazo, y que a finales de la década de los 50 y principios de los 60 provocó graves malformaciones en 20.000 recién nacidos en todo el mundo.

Las víctimas de la talidomida reivindican el mantenimiento de este producto en la ilegalidad advirtiendo que dos artículos de la Ley del Medicamento prohíben de forma expresa una nueva legalización de la sustancia; se niegan a que esté en las farmacias «aunque digan que va a haber muchos controles», y exigen que las autoridades sanitarias «reconozcan a las víctimas y acuerden una indemnización económica para todas ellas».

Con respecto a esto último, la asociación señala que España «es el único de los 50 países que se vieron afectados por el uso de la talidomida que no ha reconocido a las víctimas, a pesar de que en 1980 la Dirección General del Medicamento sí confirmó en un escrito que se habían comercializado en España siete productos con talidomida».

La comercialización se desarrolló entre 1957 y 1963, «año en que fueron retirados del mercado en España los siete medicamentos y prohibida su venta por los perjuicios ocasionados en las mujeres embarazadas». Actualmente, según esta organización, todos los hospitales del mundo hacen de la talidomida un uso compasivo para tratar el mieloma o cáncer de hueso múltiple, «porque dicen que retrasa el desarrollo de dicho cáncer, aunque el resultado final es la muerte de igual forma».

La asociación de víctimas denuncia además que el laboratorio Pharmion está ya distribuyendo el producto, bajo el nombre de Talidomida Pharmion, en los hospitales a más de 300 euros por cada caja con 28 pastillas. Asimismo, añade que el producto se puede obtener fácilmente «en el mercado negro, porque mediante Internet se puede hallar talidomida mezclada con ladrillos, con lápices o con detergente», extremo que ha negado Pharmion.

Sin brazo ni piernas

Si mi madre «tomó algún medicamento durante el embarazo y nací sin brazo y piernas, los médicos me comentaron siempre que mis malformaciones se debían a la talidomida», afirma Faustino Guadamillas, un afectado de 46 años, que conoce más casos y anima a sacar este problema a la luz.

Los afectados en nuestro país se sienten desasistidos ya que, en otros países europeos, las víctimas disfrutan de pensiones o han cobrado algún tipo de indemnización. En este sentido, José Riquelme, presidente de la Asociación de Víctimas de Talidomida, denuncia que no tienen ningún reconocimiento oficial por parte del Ministerio de Sanidad.

Recomendaciones

La FDA, la agencia del medicamento estadounidense, exige una serie de medidas de seguridad a la hora de exponerse a la talidomida. En primer lugar, advierte de que sólo puede ser recetada por médicos matriculados y por farmacéuticos con licencia que sean conscientes de los riesgos de su uso en mujeres embarazadas.

Exige además la realización de pruebas de embarazo una vez por semana durante el primer mes de uso del producto, luego una vez por mes en el caso de mujeres con ciclos menstruales regulares, o, en el caso de mujeres irregulares, cada dos semanas.

Asimismo, la FDA aconseja a las pacientes abstenerse de tener relaciones sexuales o utilizar dos métodos anticonceptivos al mismo tiempo durante por lo menos un mes antes de comenzar a utilizar la talidomida, y un mes después de recibir la última dosis.

Finalmente, todos los pacientes deben inscribirse en un registro obligatorio que servirá para realizar el seguimiento y la detección de efectos adversos del uso de la talidomida.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube