El problema de las aguas contaminadas

La contaminación química, producida por productos como pesticidas, plásticos o fármacos, constituye un problema para la salud del agua
Por Natàlia Gimferrer Morató 27 de mayo de 2013
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Imagen: lenifuzhead

El consumo de agua potable y sin riego para el consumidor vuelve a estar en tela de juicio. Según un informe redactado durante el Día Mundial del Agua (22 de marzo), reaparece la problemática sobre la seguridad del agua. Al parecer, los requisitos de calidad del agua han aumentado, según informa la directiva europea responsable, y España es uno de los países al que le cuesta alcanzar estos nuevos estándares de calidad. Por ejemplo, en la depuración de las aguas residuales se incumple en un 85% lo que dicta la UE. El artículo detalla cuáles son algunos de los residuos sin control que pueden encontrarse en el agua y cuáles son las medidas preventivas para que sea más segura.

Se ha elaborado un estudio bajo la autoría de la fundación Nueva Cultura del Agua que sustenta la falta de seguridad e higiene en las aguas españolas. El informe determina que más del 50% del agua está en mal estado debido a dos causas principales: el deterioro de su estado ecológico, excesivas extracciones, alteraciones de los cauces o reprensamiento de aguas; la presencia de contaminación química, un problema del que aún no se puede conocer el abasto de una manera directa. Las investigaciones en este campo valoran sus efectos en la salud de los consumidores y en el medio ambiente. La contaminación química es un grave problema para la salud del agua ya que afecta no solo al medio ambiente sino también a los consumidores. La aparición de contaminantes emergentes supone un problema de difícil solución, según apuntan los expertos. Este tipo de productos son los que se utilizan en la agricultura, como los pesticidas o los fertilizantes, también los plásticos, fármacos, componentes de productos de cuidado personal o subproductos de la desinfección de aguas.

Residuos sin control

Los residuos logran escapar al control de las depuradoras convencionales y, por ahora, se desconocen sus efectos sobre la salud al consumidor, así como los límites tolerables, según el director del Instituto Catalán de Investigación del Agua (ICRA) y subdirector de los Estudios del Agua del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Damià Barceló. Los fármacos tirados por el retrete, el propio organismo humano que los secreta y expulsa, el aumento de la ingesta de fármacos en la población son, según los expertos, el mayor riesgo para el agua.

Fármacos tirados por el retrete, el organismo humano que los expulsa y el aumento de la ingesta de estos son, según los expertos, el mayor riesgo para el agua

Aunque por ahora las concentraciones halladas son muy bajas, es una importante señal de alarma y es preciso investigarlo. Durante los últimos siete años se han realizado varios estudios. En 2006, se identificaron 20 tipos de medicamentos diferentes en el Ebro; en 2009, más de 29 diferentes en el río Llobregat y el Anoia; actualmente, los expertos presencian hallar 75 sustancias.

Según el ICRA, en los ríos del Mediterráneo los peces contienen restos de antiinflamatorios, betabloqueantes, sustancias químicas utilizadas para tratamientos psiquiátricos o fármacos utilizados para tratar el asma. Se han hallado también restos de productos utilizados en tratamientos de quimioterapia en el agua de hospitales y depuradoras, lo que supone un riesgo mayor debido a su resistencia y toxicidas. Sin embargo, según apunta Damià Barceló, este problema podría solventarse con un tratamiento correcto de las aguas.

Medidas preventivas

Los expertos consideran necesario reducir la cantidad de agua que se utiliza y hacer que su uso sea más sostenible. El consumo de agua aumenta año tras año, sobre todo en la agricultura, en gran parte debido al cambio climático. Con la tecnología actual aplicada a las depuradoras podrían paliarse de manera considerable la contaminación química de las aguas, además de modernizar los sistemas de riego de los cultivos, hecho que ya ha mejorado de forma notable en las últimas décadas. Prestar más atención a la limpieza de las aguas representa el factor determinante, ya que se utiliza en la elaboración de alimentos, en la cocina, para alimentarnos? Si está contaminada, es una fuente de riesgos.

AGUA POTABLE

El agua es esencial para la vida. De su salubridad depende nuestra existencia. El proceso de depuración del agua no es sencillo. Antes de salir por el grifo, ha pasado por largos procesos de potabilización para poder ser garantía de salud:

  • Precloración y flocuación: proceso por el cual se eliminan los residuos sólidos de gran tamaño y se lleva a cabo un primer filtrado. Posteriormente se añade cloro para la eliminación de los patógenos.

  • Decantación: se añaden sustancias químicas al agua para ayudar a que precipiten las pequeñas partículas que pueden haber quedado después del filtrado. Mediante decantación se retiran las partículas precipitadas.

  • Filtrados: una vez retirados todos los restos sólidos, el agua pasa por una serie de filtrados para eliminar de nuevo aquellos posibles restos de sólidos diminutos como arena por ejemplo.

  • Clarificación: el agua queda totalmente clara después de las filtraciones y la eliminación total de la turbidez.

  • Cloración: el agua se clora de nuevo para eliminar los patógenos más resistentes y desinfectar las tuberías por las que pasará.

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