La Comisión Europea está revisando las normas de higiene en materia de seguridad alimentaria. Dentro de este análisis se enmarca la presentación de propuestas de reglamentos sobre los operadores alimentarios que participan en cualquier fase de la producción de alimentos.
El objetivo es que los nuevos reglamentos fusionen, armonicen y simplifiquen los requisitos que actualmente rige la Directiva 93/43/CE del Consejo relativa a la higiene de los productos alimenticios. Una de las principales novedades de las nuevas propuestas pasa por introducir una política en materia de higiene única y transparente aplicable a todos los alimentos y todos los operadores del sector alimentario.
Además de garantizar la seguridad de los productos «de la granja a la mesa», la propuesta incluye la adopción de instrumentos eficaces para gestionar la seguridad alimentaria y cualquier crisis alimentaria que pudiera aparecer. Así, las normas se basan en la aplicación del enfoque «de la granja a la mesa» y en la introducción del sistema de «Análisis de Riesgos e Identificación y Control de Puntos Críticos» (ARICPC-HACCP) con el fin de que los explotadores de empresas alimentarias identifiquen las fases más críticas para garantizar la seguridad de los alimentos.
Este último punto pretende además identificar, aplicar, mantener y revisar los procedimientos más adecuados de seguridad alimentaria, así como la elaborar guías de buenas prácticas de higiene (BPH) y la aplicación de los principios antes citados. Esto sin olvidar la seguridad de aquellos alimentos que se producen en zonas apartadas y los métodos y producción tradicionales.
