Bebidas que cubren las necesidades de frutas y verduras

Estos preparados presentan interesantes cualidades nutricionales y pueden formar parte de una dieta equilibrada, pero en ningún caso han de ser considerados sustitutivos de la fruta y las verduras
Por EROSKI Consumer 30 de noviembre de 2006

De un tiempo a esta parte, el mercado ofrece alimentos que son presentados a la ciudadanía como opciones que ayudan a la salud. Es el caso de las bebidas que pretenden cubrir parte de las necesidades de frutas y hortalizas diarias. Estos preparados, efectivamente presentan interesantes cualidades nutricionales y pueden formar parte de una dieta equilibrada, pero es importante destacar que en ningún caso han de ser considerados sustitutivos de la ingesta de frutas y hortalizas frescas. Se trata de una opción más a la hora de completar y reforzar el consumo diario de estos alimentos.

Existen en el mercado diferentes preparados de este tipo. Algunos sólo contienen fruta y otros combinan frutas y hortalizas, incluso los hay que además añaden como aderezo aceite de oliva virgen extra.

Tipos de preparados

Bebidas de fruta.Se componen de purés, pulpa, zumo y trozos de frutas variadas. No añaden conservantes, colorantes ni azúcares. En su etiqueta alegan que equivalen a 2 raciones de fruta.

Bebidas de frutas y hortalizas. Son bebidas procedentes de zumo concentrado y de concentrados de frutas y hortalizas variadas, que no contienen azúcar añadido, ni conservantes ni colorantes. Indican que llegan a cubrir la mitad de las necesidades diarias de frutas y verduras.

Bebidas de frutas y hortalizas, aderezadas con aceite de oliva virgen extra. No proceden de concentrados, sino que se elabora a partir de vegetales frescos. Una bebida de este tipo dice que aporta 1 de las 5 raciones recomendadas de frutas y verduras al día.

¿Cuales son sus propiedades nutricionales?

En general, de acuerdo a su composición nutricional, se trata de bebidas de bajo aporte calórico que incluyen variedad de nutrientes: azúcares -de las frutas y hortalizas de las que proceden-, vitaminas, minerales, fibra y sustancias antioxidantes.

Respecto a su etiquetado, a sabiendas de que las hortalizas y frutas frescas son fuente destacable de vitaminas C, B9 y pro-vitamina A, lo que se ha observado es que no todos estos datos figuran en la información nutricional descrita en sus envases. Por tanto, lo adecuado sería que en el etiquetado de estas bebidas figurase la cantidad que aportan de dichos nutrientes por cada 100 mL, con el fin de saber si realmente equivalen a 1 o más raciones de hortalizas o frutas frescas respecto a estos nutrientes. Por otro lado, la adición de aceite de oliva extra en algunos de ellos, las enriquece en grasas monoinsaturadas y vitamina E.

Frutas y hortalizas: cinco al día, al margen de los preparados

Los expertos recomiendan su ingesta hasta Alcanzar, al menos, los 400 g diarios de cada uno de ellos; es decir 5 raciones diarias entre frutas y hortalizas.

Pero, ¿qué es una ración?

1 ración de fruta = 120 a 200 g de fruta, sin piel ni corazón ni pepitas -peso en crudo y sin desperdicios-.

Esto equivale a una pieza de fruta mediana -pera, manzana, naranja, plátano, melocotón, pomelo, chirimoya, etc.-; una rodaja grande de melón, sandía o piña; dos o tres piezas de albaricoques, ciruelas, mandarinas, higos, nísperos, etc.; y 150 g -1 taza- de fresas, cerezas, uvas, moras, etc.

1 ración de hortalizas = 150 a 200 g de hortalizas -peso en crudo y sin desperdicios-. Una ración de hortalizas equivale a un plato normal de hortalizas cocinadas -200 gramos-, 1 plato de ensalada variada -160 gramos-, 1 berenjena, 1 calabacín, 1 tomate grande, 2 pepinos o 2 zanahorias.

Cómo lograr cumplir la recomendación

Es sencillo. Basta con introducir algo de verdura como ingrediente del primer plato y/o acompañamiento de los segundos en las principales comidas, así como 3 piezas de fruta cada día.

A modo de ejemplo, se puede incluir: espinacas (200 gramos) con garbanzos y lomo con pimientos (50 gramos) en la comida, y un puré de patata y verdura (150 gramos) y pescado acompañado de un tomate de ensalada (120 gramos) en la cena. Además de 3 piezas de fruta a lo largo del día: una en el desayuno, otra a media mañana y la tercera al término de la comida o la cena.

¿Por qué son tan importantes?

Las hortalizas y las verduras frescas, como las frutas, son alimentos que contribuyen a hidratar nuestro organismo por su alto contenido de agua, además de ser nutritivas y saludables. Son ricas en vitaminas -C, B9, pro-vitamina A, etc.-, minerales -en especial, potasio y magnesio-, fibra y en menor medida, en almidón y azúcares, de ahí su bajo aporte calórico.

Son también una fuente indiscutible de sustancias de acción antioxidante, por lo que se consideran fundamentales para la salud e indispensables dentro del concepto de dieta equilibrada, contribuyendo a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, degenerativas e incluso de cáncer. Además, las hortalizas y verduras junto con las frutas, son las principales fuentes dietéticas de vitamina C y de pro-vitamina A en la dieta, de ahí que deban estar presentes en nuestra mesa a diario.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube