La cocina inglesa está basada en platos propios tradicionales, y aunque no tiene la fama de las reconocidas cocinas europeas como la francesa o la italiana, la gastronomía de Inglaterra posee numerosos platos y postres típicos, y además es una de las cocinas más abiertas a la hora de incorporar platos de otras culturas.
Horarios muy particulares Cuando uno llega a Inglaterra, tiene que asimilar que los horarios de comidas poco tienen que ver con los de un buen número de países europeos. Es típico desayunar temprano un gran plato combinado compuesto por diferentes alimentos como huevos, salchichas, bacon y tostadas, todo ello acompañado de un bol de cereales y terminando con un tazón de café o té bien cargado. El hecho de que el desayuno sea la toma más fuerte del día, convierte a la comida del mediodía en un simple almuerzo, que los lugareños realizan sobre las 12 ó 12:30, y que por lo general consta de un sándwich, o bien de un típico «Shepherd’s Pie», pastel a base de carne picada, cebolla, verduras y cubierto de puré de patatas, o de un «Steak and Kidney Pie», pastel elaborado con distintos tipos de carne de vaca y riñones. Y si uno va con prisa, en las esquinas de cualquier calle se tropieza con un típico puesto de «perritos calientes», y puede optar por un bocadillo a base de salchicha tipo Frankfurt, cebolla frita y salsas diversas.
Al tener lugar un almuerzo tan temprano, es probable que se sienta hambre a media tarde, y es habitual tomar un tentempié antes de la hora de la cena, lo que se conoce con el nombre de «tea break», la conocida hora del té, una tradición inglesa que no se pierde. Con los años, la taza de té se ha ido sustituyendo por una taza de café o chocolate, aunque existen salones de té que se llenan a esta hora y en los que se sirve el tradicional té acompañado de diferentes bollitos y pastas.
Si se quiere encontrar un lugar tradicional para cenar, uno no se puede descuidar con la hora, pues allí, se cena sobre siete o siete y media de la tarde. Es fácil encontrar en las cartas de los menús, platos combinados en los que se incluyen gran variedad de alimentos, siendo muy típica la guarnición de brócoli, y las cantidades suelen ser generosas, por lo que uno queda satisfecho y no pasa hambre aunque transcurran varias horas antes de acostarse.
Los platos más típicos En un viaje a Inglaterra es inevitable dar un paseo y no cruzarse por la calle con algún viandante comiendo pescado y patatas fritas dentro de un cucurucho de papel. Este es el típico «fish and chips» uno de los platos ingleses más tradicionales y muy demandado por los turistas. Si bien, la cocina tradicional inglesa va mucho más lejos de este básico pescado frito con patatas. Por ejemplo, en Cornualles es muy típico un plato llamado «pasty», una empanada elaborada con carne, verduras y patatas, mientras que en Yorkshire no se puede dejar de probar el roast beef y el pudin, considerado el plato nacional. Son también muy típicos los platos de carne con salsa, como el lomo de cerdo asado con salsa de manzanas o el cordero en salsa de menta, ya que uno de los pilares de la comida tradicional inglesa son las carnes de calidad asadas y servidas con muy variadas salsas, sin las que no se puede concebir la cocina de este país.
Los postres también tienen una extensa tradición. Existen recetas tradicionales de repostaría tan apetecibles como los pancakes, los pasteles de frutas, chocolate y queso o la torta Bakewell, cubierta con mermelada, almendras y helado y acompañada de múltiples tipos de panes.
A pesar de la diversidad de platos propios, la gastronomía típica inglesa se ha visto en cierto modo arrinconada, como en muchos otros países, por la aparición de forma masificada de restaurantes de comida rápida (hamburguesas, pizzas, pollos fritos…), así como de numerosos puestos de kebabs, típicos bocadillos turcos. Y es este tipo de comida rápida la que muchos turistas asocian, de manera equivocada, con la comida típica inglesa.
Cerveza de calidad Inglaterra es uno de los países en los que podemos degustar las más exquisitas cervezas. Son famosas sus cervezas «Guiness», un tipo de cerveza negra de un sabor amargo intenso y muy refrescante, si bien las cervezas rubias, aunque menos originales, son igualmente sabrosas. Además Inglaterra, nos ofrece la posibilidad de disfrutar de cualquiera de sus excelentes cervezas tanto en un pub del estilo más minimalista, como en la más tradicional y ruda tasca, o incluso en el bar de la mítica serie de televisión «Cheers» en Picadilly, donde seguro que la cerveza tiene un sabor especial.
