El Panel de Riesgos Biológicos de la Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (EFSA) ha concluido que el único parásito de productos pesqueros destinados al consumo humano que tiene probabilidades de provocar una reacción alérgica es el anisakis, cuya larva puede encontrarse en el pescado fresco. El dictamen de EFSA, que recibió la solicitud de la Comisión Europea (CE) para evaluar la seguridad alimentaria en este ámbito, afirma que el riesgo de alergia es mayor si se consumen productos contaminados con larvas vivas.
El dictamen aporta detalles sobre la efectividad de los tratamientos de congelación y de calor para matar o inactivar la larva del anisakis. Sin embargo, no aclara por completo la forma y la medida en que los alérgenos pueden provocar reacciones como la gastroenteritis y los síntomas reumáticos y dermatológicos.
EFSA también afirma que, según los conocimientos actuales, ningún área de pesca puede considerarse libre de anisakis. Para el único producto de acuicultura del que se dispone de datos suficientes en la actualidad, el salmón atlántico, el panel concluye que cuando se crían en jaulas flotantes o en tanques en tierra y se alimentan con productos libres de parásitos, el riesgo de que el pescado se contamine con anisakis es insignificante.
La agencia recomienda que se endurezcan en la UE la vigilancia y el diagnóstico de reacciones alérgicas a parásitos presentes en el pescado. El panel anima a la realización de más estudios sobre la enfermedad, como los referidos al ciclo de vida del parásito, la distribución geográfica y el papel de las prácticas de acuicultura en la propagación del parásito. EFSA añade que, con objeto de reducir los casos de alergias, es importante facilitar información sobre los riesgos de estos parásitos y los métodos para eliminarlos a los profesionales de la salud, los trabajadores de la industria pesquera y al público en general.
