Comprar un vehículo ecológico

La adquisición de coches "verdes" cuenta con diversas ayudas estatales y autonómicas
Por Elena V. Izquierdo 18 de diciembre de 2009
Img cocheecologico
Imagen: wetwebwork

Las ventajas de un vehículo ecológico son innegables, frente a los automóviles convencionales que emiten elevadas cantidades de CO2. Pero además, reportan beneficios económicos a sus usuarios. A pesar de que algunos modelos son bastante más caros que los turismos tradicionales, la compra de un coche “verde” cuenta con diversas ayudas estatales y autonómicas. Incluso en algunas ciudades se rebaja el impuesto de circulación o se facilita aparcamiento gratuito. También el plan 2000E y Movele fomentan los automóviles respetuosos con el medio ambiente. Estas medidas proporcionan una ayuda económica a los conductores, a la vez que intentan rebajar el nivel de malos humos provocado por el tráfico en las ciudades españolas.

Principales ventajas

Las principales ventajas de las que se pueden beneficiar quienes adquieran un vehículo ecológico se refieren a la matriculación, aparcamiento gratuito e impuesto de circulación.

Matriculación

El 1 de enero de 2008 se modificó el impuesto que grava la matriculación. Desde esa feha, en lugar de calcularse a partir de la cilindrada, se paga en función de la cantidad de CO2 emitido por kilómetro recorrido. Para promover la compra de automóviles poco contaminantes, los vehículos que más gases expulsan al medio ambiente pagan un impuesto superior, mientras que los denominados “verdes” están exentos. Cuando se emite menos de 120 g de CO2 por kilómetro, no se paga este tributo. Así se incentiva a quienes piensan comprarse un coche, pero también se favorece la fabricación de este tipo de automóviles. Las marcas detectan cómo cada vez más los clientes buscan turismos ecológicos y esto redunda en un aumento de los modelos “verdes” y en una caída paralela de las ventas de otros utilitarios más agresivos con el entorno, como los todoterreno.

Aparcamiento

La conducción se encarece mucho debido a la necesidad de aparcar el vehículo. Para fomentar el uso de automóviles eléctricos, algunas ciudades proporcionarán aparcamiento gratuito en las plazas de estacionamiento regulado.

En Madrid, a partir del 1 de enero de 2010 los conductores de un coche eléctrico no tendrán que pagar por estacionar su coche en las zonas SER (Servicio de Estacionamiento Regulado). También en Sevilla quien se ponga al volante de estos autos estará exento del abono de aparcamiento en las zonas donde los demás conductores sí deberán utilizar el parquímetro.

Impuesto de circulación

Algunas ciudades reducen hasta un 75% el impuesto de circulación a los coches poco contaminantes

Otras ciudades optan por reducir el impuesto de circulación a los vehículos respetuosos con el entorno. La rebaja en algunos casos llega hasta el 75%. En Galicia, esta iniciativa ha provocado un gran aumento en las ventas de coches híbridos a pesar, incluso, de que su precio es bastante elevado con respecto a los turismos convencionales. En A Coruña, los híbridos tienen una reducción del 75% en la tasa de circulación municipal durante los seis primeros años de vida del automóvil. Quienes adquieran un coche eléctrico o de biogás pagarán la mitad del impuesto. Otras ciudades gallegas como El Ferrol, Lugo u Orense también aplican un descuento del 50% en la tasa municipal de circulación a los coches que menos contaminen. Diversas localidades como Benicassim se han apuntado a este proyecto que, hasta el momento, consigue buenos resultados para el medio ambiente en los lugares donde se aplica.

Planes de ayudas

Uno de los planes estatales que pretenden fomentar la compra de automóviles ecológicos, destinado a los vehículos que funcionan con energía eléctrica, es el plan MOVELE. Las personas físicas o jurídicas que compren uno de estos vehículos recibirán una ayuda directa que oscila entre 750 y 20.000 euros, según se trate de una moto, un coche, un autobús o un camión. En virtud de su eficiencia energética, las ayudas cubrirán entre un 15% y un 20% del coste total. En el caso de los automóviles, esta bonificación puede llegar a 7.000 euros. El proyecto tiene vigencia hasta el 31 de diciembre de 2010 o hasta que se agoten los fondos otorgados.

Para participar en este proyecto y contar con la ayuda, el comprador debe dirigirse a un concesionario o comercio adherido al plan y elegir uno de los vehículos incluidos en el catálogo que aparece en la web del IDAE. La oferta actual es limitada, aunque hay varios modelos de motocicletas, turismos, furgonetas o microbuses. Está previsto que la variedad aumente y las principales marcas fabriquen coches eléctricos a lo largo de los dos próximos años.

El Programa MOVELE concede ayudas de entre 750 y 20.000 euros para la compra de vehículos eléctricos

El número de turismos es reducido. De los 15 automóviles eléctricos que aparecen en el catálogo, sólo cinco están disponibles. Los diez modelos restantes podrán adquirirse a partir de la segunda mitad del próximo año. Los coches híbridos enchufables también se comprarán en 2010.

Si bien hay pocos turismos para elegir, el catálogo de motocicletas disponibles es bastante más amplio y alcanza casi la veintena, mientras que la variedad de cuadriciclos eléctricos es superior: furgones, vehículos con caja basculante o con contenedor. Están destinados a particulares, empresas y administraciones públicas. Las personas que deseen comprar un vehículo comercial eléctrico podrán elegir entre más de 20 modelos diferentes, aunque sólo uno de ellos es un híbrido enchufable.

Vehículos incentivables

Los vehículos que pueden recibir apoyo económico tienen que ser nuevos y pertenecer a alguna de las siguientes categorías: motocicletas, cuadriciclos pesados, turismos o comerciales de menos de 6.500 kilogramos de MMA (masa máxima autorizada) y microbuses. Es necesario que pertenezcan a alguna de las siguientes categorías:

  • Vehículos Eléctricos (BEV): están alimentados a partir de baterías recargables de la red general eléctrica.

  • Vehículos Híbridos Enchufables (PHEV): entre sus distintos modos de funcionamiento disponen de capacidad de tracción sólo eléctrica, con acumulación de energía en las baterías mediante alimentación de la red general eléctrica, suficiente para que la autonomía en modo sólo eléctrico sea al menos de 20 kilómetros.

  • Vehículos Eléctricos de Autonomía Ampliada (REEV): sólo disponen de capacidad de tracción eléctrica y, con independencia de la posibilidad de recarga de sus baterías mediante diferentes fuentes, cuando lo hagan a partir de la red general de energía eléctrica, a plena carga, su autonomía debe ser superior a los 32 kilómetros.

El proyecto está dotado con diez millones de euros, previstos para tres fines: ocho millones están destinados a canalizar ayudas para la adquisición de vehículos por los usuarios; un millón y medio apoya la creación de redes de estaciones de recarga en Madrid, Barcelona y Sevilla; y otro medio millón se dedica a gestión, desarrollo de propuestas normativas, asistencia técnica y estudios de seguimiento y evaluación de resultados. Sus objetivos son: introducir en el mercado español una flota de al menos 2.000 vehículos eléctricos, crear las primeras redes de puntos de recarga públicos con al menos 500 ubicaciones, reducir el consumo de carburantes derivados del petróleo en 4,7 millones de litros al año y reducir las emisiones de CO2.

Plan 2000E

Otro plan de ayudas es el 2000E, que incentiva la sustitución de coches antiguos por otros vehículos poco contaminantes. Su objeto es la concesión de ayudas directas para la adquisición de vehículos M1 (de motor, con al menos cuatro ruedas, diseñados y fabricados para el transporte de pasajeros) y N1 (cuya masa máxima no supera las 3,5 toneladas, diseñados y fabricados para el transporte de mercancías). Para percibir la ayuda, el coche que se adquiera debe ser nuevo -o de segunda mano con una antigüedad de hasta cinco años- y ha de reunir las siguientes características:

  • Cuando sean vehículos de turismo categoría M1:
    • Emisiones de CO2 no superiores a 120 gramos/kilómetro (vehículo ecológico).
    • Emisiones de CO2 no superiores a 149 gramos/kilómetro, que incorporen sistemas de control electrónico de estabilidad y detectores presenciales en plazas delanteras (vehículo innovador).
    • Emisiones de CO2 no superiores a 149 gramos/kilómetro, que incorporen un catalizador de tres vías para vehículos de gasolina o dispositivos EGR de recirculación de gases de escape para vehículo diésel.
    • Si son vehículos de transporte de categoría N1, sus emisiones de CO2 no serán superiores a 160 gramos/kilómetro.

    Las ayudas se prevén para adquisiciones de vehículos que se realicen entre el 18 de mayo de 2009 y el mismo día de 2010

    El precio de adquisición del automóvil no superará los 30.000 euros, IVA incluido, antes de aplicar las ayudas. Pero es imprescindible otro requisito: el beneficiario debe dar de baja definitiva -mediante certificado de achatarramiento por parte de un Centro Autorizado- un turismo de categoría M1 o un vehículo de transporte de categoría N1 de una antigüedad mínima de 10 años o un kilometraje mínimo de 250.000 kilómetros, si se adquiere un vehículo nuevo (o de una antigüedad de 12 años si se compra uno de segunda mano).

    El importe de las ayudas para las adquisiciones de vehículos nuevos es de 500 euros por unidad, con cargo al Presupuesto de Gastos del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio; 500 euros, o una cantidad mayor, concedida por la respectiva comunidad autónoma que decida su adhesión al Plan 2000E, y 1.000 euros más por parte del fabricante o importador del vehículo adquirido. En el caso de los vehículos de segunda mano, la ayuda no incluirá el tramo correspondiente a la aportación de fabricantes o importadores. Las ayudas se concederán a las adquisiciones de vehículos que se realicen desde el 18 de mayo de 2009 hasta el 18 de mayo de 2010, o hasta que se financien 200.000 vehículos.

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