Las recetas griegas son puro sabor mediterráneo. Para picotear de manera informal, como primer plato vegetal, para aderezar vegetales… Sea cual sea el formato, son fáciles de preparar y utilizan productos muy sanos, como berenjenas, aceite de oliva, yogures, pan, tomates, aceitunas o queso. Estos ingredientes, que se pueden disfrutar en cualquier estación del año, resultan muy refrescantes y fáciles de digerir en las épocas de más calor. Por lo tanto, estos platos son idóneos para el verano. Para este artículo se han elegido cinco recetas griegas que van desde el picoteo hasta el postre y se explica cómo prepararlas.
1. Crema fría de berenjenas para entrantes o dip
Esta es una manera sencilla de preparar un dip o entrante de picoteo, rápido y sano, que permitirá ofrecer un extraordinario aperitivo.
Primero se abren por la mitad las berenjenas, se hacen unos cortes transversales sin llegar a la piel, se salan ligeramente y se dejan boca abajo en una rejilla durante 30 minutos, para eliminar parte de los jugos amargos que tiene esta hortaliza.
Transcurrida esa media hora, se lavan y colocan las berenjenas con la pulpa hacia arriba en el horno a 200 ºC durante otra hora. Cuando están asadas, se les retira la piel y se introducen peladas en un vaso de batidora junto con un diente de ajo, una cucharadita de crema de sésamo o ajonjolí (o una cucharadita de semillas de sésamo ligeramente tostadas), una cucharada de zumo de limón y el aceite de oliva. Se tritura todo hasta conseguir una crema fina y brillante que hay que poner a punto de sal y servir acompañada de unas aceitunas negras y unos panecillos tostados.
2. Ensalada griega con queso feta y vinagreta de miel
En primer lugar hay que lavar unos pepinos y, sin pelarlos, cortarlos en rodajas finas. Además, se deshoja y lava una lechuga. Se lavan también un par de tomates, que habrá que cortar en gajos y mezclar en una ensaladera con la lechuga, unas aceitunas y los pepinos escurridos. Se añaden una cebolleta cortada en rodajas finas y el queso feta cortado en dados. Para dar un toque especial, antes se puede saltear el queso en una sartén antiadherente con unas gotas de aceite de oliva, para que se dore un poco la superficie.
Y, por último, hay que disolver la sal y la pimienta en el vinagre y mezclarlo con aceite de oliva y un diente de ajo pelado y picado. Con ello se aliña la ensalada.
3. Gyros o pan de pita con salteado de verduras, lomo y salsa tzatziki
Para seguir profundizando en la gastronomía griega, se propone continuar con un pan de pita relleno de verduras salteadas y unas tiras de lomo de cerdo fresco. Como acompañamiento, la salsa griega por excelencia, la tzatziki, que se hace con pepino, yogur y diversas hortalizas.
Lo primero que hay que hacer es trocear una cebolleta, una zanahoria, un pimiento rojo y un diente de ajo, todo ello en juliana (tiras finas), y saltearlo con unas cucharadas de aceite de oliva y sal. Cuando la verdura esté cocinada, se sube el fuego y se agrega la carne cortada en tiras. Y cuando se cocine la carne, se saca del fuego y se deja templar.
Mientras, se prepara la salsa tzatziki. Para ello, se pelan los pepinos y se cortan en tiras finas con ayuda de un rallador. Se espolvorean con sal y se dejan escurrir durante unos 15 minutos sobre un colador para que pierdan parte de sus jugos. Se trituran la cebolleta fresca y una pizca de ajo con una cucharada de aceite de oliva y unas gotas de zumo de limón y se mezcla todo con un yogur griego.
Una vez escurridos los pepinos, hay que juntarlos con la mezcla del yogur y remover con cuidado la salsa. Se deben probar los pequeños matices de ajo y limón para que quede al gusto. Se termina con unas hojitas de perejil y eneldo picado y se deja reposar en la nevera durante 30 minutos.
La salsa tzatziki se sirve a temperatura ligeramente fresca acompañando el pan de pita relleno con las verduras salteadas y el lomo de cerdo.
4. Gemistá o pimientos rellenos de arroz y verduras
Se semiasan unos pimientos rojos grandes y limpios de pepitas en el horno a 250 ºC durante 10 minutos con un poco de aceite de oliva y sal, que se reservan para rellenar después. En una paella con aceite caliente se sofríe un diente de ajo y se dora una cebolla con una zanahoria, todo ello cortado en brunoise. Se rehoga y, a continuación, se añade el arroz.
Después de estar removiendo con una espátula durante dos minutos, se vierte agua muy caliente y se añade la sal. Se lleva a fuego vivo hasta que hierva y, después, a fuego medio hasta su cocción total. Hay que rellenar los pimientos con esta mezcla y hornearlos a la temperatura de 200 ºC durante cinco minutos. Se sirven calientes recién sacados del horno.
5. Relleno de pasta filo con frutas frescas y yogur griego
Todo menú necesita un postre como colofón. En este caso, para ello se utilizan unas frutas frescas ligadas con unas cucharadas de yogur batido, que seguro con su sabor transportarán a los comensales hasta el Mediterráneo. Además, es una receta para aprovechar la fruta y presentarla de una manera original y divertida.
Primero se lava, pela y trocea la fruta que hay que mezclar con el yogur natural. Todo ello se pone al punto de azúcar, de forma que la fruta quede ligada, pero no en exceso para que no se salga luego del canutillo de pasta filo.
Se envuelve la macedonia y el yogur con la pasta filo, haciendo canutillos, para después introducirlos en el horno en modo gratinador a fin de que se tueste la pasta filo. Se sirven con un poco de mermelada de fresa aligerada.
