Créditos para el alquiler

El número de personas que han encontrado en el alquiler una salida para poder emanciparse del hogar familiar, cambiar de piso o formar una familia aumentó con el incremento del precio de la vivienda registrado durante los últimos años. De hecho, en los dos últimos años se firmaron en torno el 25% de los contratos de alquiler del total de viviendas arrendadas en España. Con la llegada de la crisis y el fin del llamado boom inmobiliario -y la consecuente restricción del crédito para la adquisición de viviendas- la opción de alquilar un piso crece, y cada vez son más los ciudadanos que, aun queriendo tener un piso en propiedad, sólo cuentan con la opción de alquilarlo.

Un alquiler es tan elevado que a veces la renta se aproxima o supera a la cuota que se paga mensualmente por la hipoteca

Sin embargo, el precio del arrendamiento en España tampoco permite a los ciudadanos elegir con libertad el lugar donde vivir, pues es tan elevado que en muchos casos la renta se aproxima e incluso supera a la cuota que se paga mensualmente por una hipoteca. Esto contrasta, desde luego, con la cantidad de casas vacías que los propietarios no ponen en alquiler bien porque no les es rentable o por el temor a que los futuros inquilinos no hagan frente a las obligaciones que aparecen en el contrato. Ante la necesidad de dar un impulso al alquiler para intentar paliar esta situación que afecta negativamente a propietarios e inquilinos, tanto instituciones públicas como privadas han creado distintas iniciativas entre las que se encuentran los créditos a particulares para el alquiler, los dirigidos a quienes desean arrendar su casa y aquellos destinados a los promotores de vivienda.

Caja Navarra presentó hace unos meses el crédito “CAN Alquiler”, la idea ganadora de un concurso en el que participaban los empleados de la entidad. Con este préstamo se busca incentivar el mercado del alquiler dando a los propietarios la seguridad que necesitan para que decidan arrendar su casa y, a su vez, permite a los jóvenes acceder de una manera más sencilla a una vivienda.

A través de este préstamo, los inquilinos pueden solicitar una cantidad entre 7.000 y 35.000 euros para devolver en el plazo de un año. Lo más llamativo del crédito es que el interés para el arrendatario es del 0%. El inquilino es quien firma el préstamo y el que ha de devolverlo mensualmente, según el importe que abone al propietario en concepto de alquiler. El interesado puede pedir un crédito de 12.000 euros e irá devolviendo al banco 1.000 euros cada mes, la misma cantidad que pague por el alquiler y sin ningún coste de financiación.

Por otra parte, el propietario recibirá por adelantado y en un solo pago la cantidad íntegra del alquiler anual, 12.000 euros. Sin embargo, el dueño del piso sí que debe pagar una comisión a Caja Navarra por el dinero que le adelantan. Desde la entidad indican que “para que este coste de financiación no termine convirtiéndose en un gasto que se pierde, la CAN ofrece a los clientes la posibilidad de invertir este importe cobrado en el fondo de inversión AC Fondepósito o en otros productos”.

En algunas ocasiones hay propietarios que cuentan con un piso libre y desean arrendarlo pero son reticentes a dar el paso. Más aún cuando la casa necesita ciertos arreglos como mejorar la instalación eléctrica, de gas, los sistemas de calefacción, refrigeración, las tuberías o pequeñas reformas como pintar o cambiar el suelo. Estas modificaciones son a veces la causa de que el propietario se eche atrás, puesto que no siempre puede afrontar económicamente los gastos que le suponen las reformas. Para evitar estos pequeños inconvenientes, el Ministerio de la Vivienda, a través de la Sociedad Pública de Alquiler, pone a disposición de los propietarios de un piso -siempre que deseen arrendarlo a través de este organismo- un préstamo para realizar las obras.

El Préstamo para Mejora de Vivienda se lleva a cabo a través de un convenio de colaboración entre el BBVA y la Sociedad Pública de Alquiler. El importe máximo que puede pedir el propietario asciende a 20.000 euros y puede devolverlo hasta en cinco años, sin cuotas hasta un máximo de seis meses después de formalizar el préstamo, y carece de comisiones de apertura. Los préstamos se pueden gestionar en cualquier sucursal del BBVA, a través de Internet o bien mediante una llamada telefónica

El importe máximo que puede pedir un propietario para mejorar su piso asciende a 20.000 euros a devolver en cinco años

Las condiciones varían según sea el peticionario cliente o no del BBVA. A quienes no estén vinculados a la entidad, se les aplicará un 4,95% de interés nominal fijo durante el primer año y el resto, variable al Euribor a un año +2,50%, sometido a revisión anual. Si la persona que solicita el crédito está vinculada al BBVA, tiene domiciliada la nómina y contratada una tarjeta de crédito, pagará un interés nominal fijo del 4,20% el primer año y el resto, variable a Euribor a un año +1,75%, sometido a revisión anual, al igual que en el caso anterior.

Con el objetivo de fomentar y promover el mercado del alquiler, el Instituto de Crédito Oficial ha puesto en marcha la “Línea ICO-Vivienda 2009” que, según estiman los creadores de este producto, permitirá poner en el mercado del alquiler unas 25.000 viviendas.

Para lograrlo, el ICO cuenta con una financiación de 3.000 millones de euros que va dirigida a las empresas y sociedades con domicilio social y fiscal en España que sean titulares de inversiones inmobiliarias. Los empresarios deben destinar la financiación que reciben a cancelar el préstamo promotor que la sociedad tenga formalizado con la entidad de crédito. Según señalan en el ICO, “como máximo, con cargo a esta línea se financiará hasta el 50% del préstamo, con el límite del 70% del valor inicial de la promoción. Asimismo, la entidad de crédito refinanciará el importe restante en los mismos términos y condiciones que los establecidos por el ICO”.

Lo que se busca con estos incentivos es que las viviendas de las promociones que ya estén terminadas se destinen al alquiler, que podrá incluir, cuando así se estime oportuno, la opción a compra.

Desde el Instituto de Crédito Oficial recuerdan que el crédito por cada promotor no podrá superar los 50 millones de euros en una o varias operaciones. El tipo de interés que se aplica es variable, referencia ICO más 1,44% y el plazo de devolución es de siete años con amortización única al vencimiento de la operación. En el caso de que se enajene o ejercite la opción de compra durante la vida de la operación, se producirá la amortización anticipada obligatoria.